El Valencia CF dio este martes otro pase adelante para llegar a su nuevo estadio. El club valenciano llegó a un acuerdo con la cooperativa ADU Mediterráneo para la venta de los terrenos del actual estadio de Mestalla. La consultora CBRE, que asesoró la operación, fue la encargada de realizar el anuncio de una de las mayores transacciones de terrenos de la última década en la ciudad de Valencia.
La operación contempla el traspaso de un superficie de 97.225 metros cuadrados en el centro de la ciudad. De esa cifra total, 55.769 metros cuadrados, es decir el 57,3% del terreno, irán destinados a la construcción de viviendas y los 41.456 metros cuadrados restantes estarán destinados a edificios terciarios.
La firma adjudicataria de los terrenos decidió además confiar en CBRE para que gestione la venta de la parte terciaria del proyecto. Asimismo, la consultora inmobiliaria también se encargará de intermediar en la venta de las viviendas en régimen de cooperativa dentro del registro de demandantes de la patronal del sector Concovi.
A pesar de que la"cifra mágica de la operación" inmobiliaria no se ha hecho pública debido a que está sujeta a un contrato de confidencialidad, el presidente de la entidad deportiva, Mateu Alemany, sí que informó en rueda de prensa de que el precio de la oferta vinculante presentada por ADU Mediterráneo "está por encima del valor neto contable". Esto indica que la cifra acordada es superior a los 113 millones de euros en los que están valorados esos terrenos. La suma de los 90,2 millones de euros que valen los terrenos, más los 21,54 millones de las construcciones.
El presidente del club añadió que la importancia de haber negociado con una cooperativa por un doble motivo. En primer lugar, Alemany señaló que la cooperativa ofrece más al no necesitar tener el margen que busca un promotor y, en segundo lugar, para una cooperativa como ADU Mediterráneo, recibir el suelo en tres años (cuando finalicen las obras del Nuevo Mestalla) en lugar de ahora representa una virtud y en lugar de un problema.
Alemany desveló que sobre la mesa de hubo "tres ofertas más" para la adquisición de los terrenos de Mestalla. Además, el directivo mallorquín aseguró que con la cifra acordada, el Valencia CF está "muy cerca" del coste total que supone "financiar íntegramente la contrucción del nuevo estadio". Respecto al Nou Mestalla, del cual sus obras estaban paradas debido a la crisis económica, el director general del Valencia señaló que era posible, tras una periodo de obras que duraría entre dieciocho y veintidós meses, podría estar operativo para 2022.
El directivo mallorquín recordó después que la tramitación de la operación todavía no ha sido autorizada por el Ayuntamiento de Valencia. Así, desde la directiva del Valencia CF esperan mantener una reunión urgente con el nuevo Consistorio que se configure tras las elecciones municipales del próximo 26 de mayo. A pesar de las avances anunciados por Alemany sobre la fecha de fin de las obras y su coste, el directivo señaló también que ya se encuentran trabajando varios arquitectos para obtener un resultado concreto del coste y el tiempo.
Alemany concluyó los detalles de la operación alegando que el proyecto "va a ser bueno para ciudad y bueno socialmente". Respecto a las dudas que tiene el club propiedad del empresario chino Peter Lim con Bankia y La Caixa, el director general del Valencia CF, dijo que éstas habrán bajado sustancialmente y que será necesario, en su momento, un crédito puente.
Alemany cree que los elementos de negocio que puede generar el nuevo campo posibilitarán nuevos ingresos a través de una explotación en principio directa por parte del Valencia, aunque espera muchas propuestas interesadas en explotaciones específicas.
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