Vienen curvas: Guindos alerta a la banca de que su rentabilidad puede empeorar

Luis de Guindos, vicepresidente del BCE
Luis de Guindos, vicepresidente del BCE
Apie

Agárrense porque vienen curvas. El vicepresidente del Banco Central Europeo, Luis de Guindos, ha advertido de que la rentabilidad de la banca en la zona euro puede ir a peor al deteriorarse las expectativas de crecimiento. El problema de la rentabilidad es uno de los conflictos que la banca del área del euro mantiene con el BCE. Uno y otro lado coinciden al reconocer que ese problema existe, si bien no se ponen de acuerdo en su origen.

Las entidades defienden que esa merma de su rentabilidad se debe al nivel de tipos históricamente bajos que el emisor mantiene en la zona euro; mientras que el banco central sostiene que esa pérdida de rentabilidad se debe a que los bancos deben hacer un esfuerzo mayor por ajustar sus costes. Hace solo unos días, el presidente del BCE, Mario Draghi, abrió la puerta a poner en marcha nuevos estímulos si no mejoran las perspectivas económicas. Lo hizo durante el foro de bancos centrales que la entidad organiza anualmente en la localidad portuguesa de Sintra.

De Guindos ha inaugurado la reunión Anual de la Asociación de Banca Italiana sobre "Supervisión, Riesgos y Rentabilidad 2019" y aseguró que, aunque "la resistencia del sector bancario de la zona del euro ha seguido mejorando en los últimos años, apoyada por una expansión económica sostenida", también ha reaparecido la preocupación sobre la rentabilidad, ya que se prevé que "el crecimiento económico se desacelerará en 2019". Ha apuntado además que "varios bancos siguen teniendo valoraciones de mercado deprimidas, con una relación precio-valor muy por debajo de su valor objetivo".

Ante ello, el que fuera ministro de Economía español incide en que la baja rentabilidad afecta negativamente a la estabilidad financiera porque "hace que sea más difícil para ellos (los bancos) acumular reservas contra imprevistos y limita su capacidad para financiar el crecimiento de los préstamos". Al mismo tiempo, asegura que las entidades con débiles perspectivas de rentabilidad y bajas valoraciones del mercado podrían encontrar muy costoso, o incluso prohibitivo, obtener capital de las fuentes del mercado si fuera necesario.

De Guindos ofreció algunas soluciones para que los que los bancos regresen a una rentabilidad sostenible y entre ellas propuso las tradicionales como "la reducción de personal y el cierre de sucursales, hasta la adopción de nuevas tecnologías de ahorro de costos destinadas a digitalizar los servicios de intermediación financiera". Pero además indicó la necesidad de que los bancos mejoren su capacidad de generar ingresos y para ello propone "mejorar las tarifas y las actividades basadas en comisiones".

Entre otras recetas para mejorar esa ratio, el número dos del BCE propone, además, reforzar las sinergias de reducción de costes. Desde su punto de vista, "las fusiones y adquisiciones nacionales tienden a centrarse en lograr sinergias de costos, mientras que las transfronterizas parecen estar impulsadas más por las oportunidades de expansión".

Apunta, igualmente, que "la consolidación doméstica es crucial" y que "la consolidación entre países es un complemento indispensable para las fusiones y adquisiciones nacionales". "Todavía hay algunos obstáculos importantes que nos impiden aprovechar todos los beneficios de la consolidación transfronteriza", indica.

Mostrar comentarios