'Waivers', pérdida de Canalejas... Así los Villar Mir acabaron por caer ante la banca

  • La venta de su porcentaje en el centro comercial consiguió librar a la familia del préstamo con el que hicieron frente a la ampliación de Colonial.
Villar Mir, OHL
Villar Mir, OHL
EFE

Las últimas desinversiones de la familia Villar Mir -tanto a través del conglomerado GVM como de la constructora OHL, la salida de Canalejas y la venta de Concesiones- tienen una razón clara, la necesidad de liquidez para hacer frente a las numerosas deudas con las que cuentan ambas sociedades. Una obviedad que el propio grupo familiar reconoce y desglosa en sus cuentas. En ellas, recientemente remitidas al Registro Mercantil, admite que tuvieron que pedir varios 'waivers' -permisos para incumplir las cláusulas del contrato- con el fin de poder hacer frente al pago de los préstamos que vencían el 31 de diciembre de 2017. Esta es la cronología de su descenso a los infiernos.

El crédito sindicado que firmó la constructora OHL por valor de 250 millones de euros en el año 2015 con varias entidades tenía el compromiso de cumplimiento de "una serie de ratios financieros al cierre de cada ejercicio", según señalaba el grupo en sus cuentas anuales. Pero "a 31 de diciembre de 2017 no se cumplen", tal y como el grupo familiar -accionista mayoritario de OHL pese a las recientes rebajas en su porcentaje de participación- admite en sus últimas cuentas anuales. 

Lo mismo ocurrió con la Financiación Sindicada Multiproducto que firmó la constructora gracias a la garantía de las acciones de las filiales OHL Concesiones y Desarrollos por valor de 190 millones de euros. Esta operación era parte del acuerdo al que llegó GVM con Sabadell, Santander, Popular, Bankia, CaixaBank, Crédit Agricole y Société Générale para sustituir al acuerdo previo de 2016 que ascendía a 746 millones. Los requisitos que debía cumplir la empresa al cierre del ejercicio tampoco se cumplieron, por lo que los Villar Mir y el resto de accionistas tuvieron que hacer frente al pago de este préstamo.

En ambos casos ante la imposibilidad de pagar tal cantidad, y según admiten en las cuentas del ejercicio 2017, la firma solicitó un permiso para incumplir las cláusulas -el llamado 'waiver'- que fue "autorizado con posterioridad al cierre del ejercicio" y que les permitió esperar a cancelar el crédito al momento en que "se materialice la venta del 100% de OHL Concesiones", es decir, el pasado mes de abril. 

La caída del precio de la acción y las importantes pérdidas registradas por la compañía en el último ejercicio -agravadas durante este 2018- han hecho que los ratios financieros necesarios para cumplir los objetivos que le solicitaban los acreedores no se hayan cumplido. 

OHL consiguió cerrar la operación de venta de esta división el pasado mes de abril al fondo australiano IFM por un importe de 2.158 millones de euros. Pero no fue la única desinversión que el conglomerado familiar llevó a cabo en los últimos meses forzado por la presión de la banca. Poco después se deshizo de un 12% de la compañía -bajando del 51% del accionariado- y de su proyecto estrella, Canalejas. 

El caso de Canalejas

La venta del último porcentaje que le quedaba a la familia en Canalejas -el próximo centro comercial del lujo que pretende establecerse en el centro de Madrid- durante el pasado agosto también sirvió para cancelar otra histórica deuda. El dinero obtenido de la primera venta, que se llevó a cabo en 2017 se utilizó para deshacerse de parte del préstamo que contrajo con Deutsche Bank para llevar a cabo la ampliación de capital de Inmobiliaria Colonial. 

La ahora socimi estuvo participada por la familia Villar Mir hasta el pasado año. Fue en julio cuando decidieron deshacerse, dentro de la política de desinversión de la firma, de los títulos de la inmobiliaria, pero no consiguieron cancelar el préstamo que pidieron para su adquisición debido a las dificultades económicas sobrevenidas. 

Con la venta de parte de la participación de uno de sus proyectos estrella, la firma de los Villar Mir consiguió "amortizar el importe a corto plazo" de la deuda que mantenía con el banco alemán y refinanciar el resto de las obligaciones que detentaba con dicha entidad, tal y como confirma en las cuentas anuales la propia sociedad. 

Mostrar comentarios