Villatuerta: el pueblo que saltó a coches y jets de lujo para salvar al cuero navarro

  • La empresa Tenerías Omega ha pasado de facturar 13 millones de euros hace apenas seis años a los 33 con los que cerró el 2017.
Tenerías Omega, la piel convertida en lujo
Tenerías Omega, la piel convertida en lujo

En ocasiones una idea puede salvar a una empresa. La de los dirigentes de Tenerías Omega lo lograron al coger en la quiebra en 1991 a una empresa tradicional de Estella, Curtinova y apostar por especializarse en el curtido de pieles y cueros para productos de lujo. Su destino: los asientos de cuero de los jet privados más exclusivos, de la business class de Iberia, Fly Emirates, Turkish Airlanes… O los modelos de coche más exclusivos de Toyota, Honda, Cadillac, Ford, BMW o Bentley… La jet set del planeta se sienta en sus viajes por el mundo sobre piel española de cuero curtido en Navarra a orillas del río Ega.

El secreto de su éxito reside en que "la piel de vacuno español es de mayor calidad porque sus fibras son muy compactas. Y sin matar a un solo animal, porque se aprovechan aquellos que van a ser sacrificados por el consumo humano", explica el gerente de tenerías Omega, Alberto Navarro. El 'milagro' se hace desde Villatuerta (Navarra), un pueblo de poco más de 1.000 habitantes de la Merindad de Estella. Casi 250.000 pieles de novillo pesado se curten al año en sus instalaciones.

En la actualidad, la empresa está considerada como uno de los principales proveedores europeos de cuero para los sectores de la automoción, tapicería doméstica y aviación. Con unas instalaciones de alrededor de 67.000 metros cuadrados, Tenerías Omega tiene una capacidad de producción estimada en 24.000 cueros mensuales, lo que equivale a unos 120.000 metros cuadrados de cuero al mes.  

El gran impulso de la firma llegó en el año 2008 cuando lograron firmar un contrato para suministrar en exclusiva pieles de vacuno europeas al mayor fabricante del mundo de estas para el sector del automóvil, la compañía Eagle Otawa, al que Tenerías Omega suministra pieles semicurtidas que la empresa norteamericana termina de fabricar y vende luego a clientes del sector de la automoción como como Toyota, Honda, Cadillac, General Motors o Ford.

La empresa logró además, gracias a una gran inversión en I+D de más de seis millones de euros para "una producción de calidad y sostenible", conseguir la homologación de sus pieles por los dos gigantes de la aeronáutica como son Airbus o Boeing, que exigen un exhaustivo control de calidad y propiedades. Y ahora, para este 2018, el objetivo, según explica Patricia Ponce, responsable de exportación, es "ampliar la gama de tapicería para jets privados porque éste es un segmento de mercado que está creciendo nuevamente después de años de crisis".

Con estos logros ha pasado de facturar 13 millones de euros hace apenas seis años a los 33 con los que cerró el 2017. Un impacto también en el  empleo porque la demanda ha hecho que pase de tener 65 trabajadores hasta los 135 que forman parte de su plantilla actualmente. Además han logrado el reconocimiento de la Bolsa de Londres como una de las 1.000 compañías europeas de mayor crecimiento y el de la Cámara de Comercio e Industria de Navarra, que en 2017 les concedió el galardón a la internacionalización. Y es que Tenerías Omega exporta "el 92% de su producción", principalmente a Estados Unidos, pero también a Hungría, Alemania, Francia, Inglaterra o China.

Tratar la piel es todo un arte
Tratar la piel es todo un arte. / Tenerías Omega.

El grupo Lederpiel, en su conjunto, tiene cerca de 300 empleados en tres plantas que trabajan con vacuno. Incusa, en Silla (Valencia), curte piel para calzado, marroquinería y accesorios, y obtiene subproductos del serraje; la citada Tenerías Omega produce piel para automóvil, aviación y una pequeña parte para tapicería doméstica, el sector de las sillas de montar o el denominado Hospitality & Contract (hoteles, casinos, restaurantes…); Dercosa, en Cheste (Valencia), curte serraje para calzado y marroquinería. Los preferidos de los ricos de este mundo.

cómo hacer sentir el lujo

Así se cuida el asiento de un jet privado o un Boeing

Curtir una piel grande para el asiento de un Boeing 747, un Airbus A330 o un Bentley, no es fácil y exige tres pasos principales: operaciones de tratado de la piel con agua; de secado y operaciones de acabado. En la primera etapa, toda la pieza de cuero se trata usando molinos de tambor húmedos en los que tienen lugar diversas combinaciones de baños, productos químicos y procesos mecánicos.

El cuero utilizado en la tapicería automotriz es principalmente curtido al cromo, "aunque existe una demanda creciente de sin cromo o al cuero sin contenido de sales minerales, exclusivamente con sintanos, polímeros y curtientes vegetales". Una vez que la piel ha sido curtida y teñida, se seca.

El acabado, “es crucial para crear las características principales, la calidad y la personalidad del artículo terminado, tales como la apariencia, clasificación, sensación y propiedades físicas; Los exámenes físicos son las especificaciones que describen cómo responderá el producto al uso y la manipulación, y se determinan mediante pruebas estandarizadas”.

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