(AMPLIACIÓN) PASCUA MILITAR. FELIPE VI PIDE "NO ESCATIMAR ESFUERZOS" EN LA LUCHA CONTRA EL TERRORISMO

Felipe VI reclamó este viernes “no escatimar esfuerzos” para aumentar la capacidad de España en la “prevención” y “respuesta” ante el terrorismo, una “lacra” que “pone en peligro nuestra sociedad, desprecia nuestros valores democráticos y es un enemigo de la Humanidad”.
Así se pronunció el Rey durante su discurso de la Pascua Militar, un acto celebrado en el Palacio Real de Madrid al que asistieron la reina Letizia, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y los ministros de Defensa e Interior, María Dolores de Cospedal y Juan Ignacio Zoido, respectivamente.
También estuvieron presentes el jefe del Estado Mayor de la Defensa (Jemad), almirante general Fernando García Sánchez, los jefes de Estado Mayor del Ejército de Tierra, la Armada, el Ejército del Aire, el director general de la Guardia Civil, José Manuel Holgado, y otras autoridades civiles y militares.
Felipe VI ha llegado pasadas las 12.00 horas al Palacio Real acompañado por la reina Letizia ataviado con el uniforme de capitán general de la Armada para presidir su tercera Pascua Militar como Rey.
LUCHA CONTRA EL TERRORISMO
En un discurso centrado en la proyección internacional de las Fuerzas Armadas y sin ninguna alusión política, el Rey agradeció el trabajo realizado por el anterior equipo que estuvo al frente del Ministerio de Defensa en la última legislatura.
“A pesar de las dificultades, que conozco bien, y gracias al esfuerzo, profesionalidad, imaginación y abnegación de todos, se han logrado mantener las capacidades militares necesarias para el cumplimiento de las misiones asignadas”, comentó.
El Rey puso de manifiesto que la seguridad es “un valor fundamental” y una “condición básica” para permitir “el desarrollo y el progreso” de España, así como el bienestar de los españoles. Por ello, subrayó que el terrorismo “ataca sin escrúpulo alguno” en cualquier lugar y que “son muchas las naciones cuyas sociedades sufren con su vileza y ensañamiento”.
Tras solidarizarse con aquellos países que han sufrido en primera persona la lacra del terrorismo, Felipe VI puso a éste en el “centro de las preocupaciones de seguridad” de los españoles y de sus socios y aliados.
Ante esta situación, el Rey dejó claro que no se deben escatimar esfuerzos para aumentar la capacidad de España en la “prevención” y “respuesta” ante la “lacra” del terrorismo, que “pone en peligro nuestra sociedad, desprecia nuestros valores democráticos y es un enemigo de la Humanidad”.
En ese sentido, el Monarca puso de manifiesto que se tiene la “obligación” de hacer todo “cuanto esté en nuestras manos por defender los derechos y garantías individuales de nuestros conciudadanos”, así como “contribuir al esfuerzo internacional de lucha contra la amenaza global común”.
Valoró que el trabajo realizado por todas las instituciones implicadas en la lucha contra el terrorismo está dando “buenos frutos”, por lo que animó a aprovechar el conocimiento y la experiencia disponible para estar “lo mejor preparados” para combatirlo con “máxima eficacia y total determinación”.
PROYECCIÓN INTERNACIONAL
A su vez, llamó la atención sobre la necesidad de mantener la apuesta por el “proceso de modernización” que posibilite contar tanto con la operatividad como la perspectiva necesarias “para ir siempre por delante”, ya que “no podemos dejarnos rebasar por los nuevos escenarios y los desafíos actuales, cada vez más cambiantes e imprevisibles”.
Esto le sirvió para afirmar que la participación en maniobras y ejercicios combinados en la escena internacional, la presencia en la misiones de la UE, la OTAN y ONU, así como el apoyo a países en situación de inestabilidad son “ejemplos” de la proyección exterior que “debe seguir manifestándose en el futuro” al demostrar el “esfuerzo solidario por la paz y la estabilidad internacionales”, y “genera confianza” en España.
Felipe VI se refirió a la “proyección”, “esfuerzo” y “confianza” como elementos que deben estar basados en una “eficaz disponibilidad y capacidad de reacción” de las Fuerzas Armadas para responder “con prontitud” ante cualquier amenaza. A su juicio, la seguridad y defensa de España pasan por su voluntad de actuar junto a sus socios y aliados, al amparo de la legalidad internacional, en los lugares considerados estratégicos para el país.
Destacó que gracias al esfuerzo diario de los miembros de las Fuerzas Armadas, España es reconocido como un socio “leal, fiable y responsable” con los compromisos adquiridos, lo que ha permitido al país asumir “puestos de alta responsabilidad y liderazgo” en las diferentes organizaciones multilaterales en las que se integra.
Este reconocimiento internacional, comentó, ha sido posible gracias a la transformación llevada a cabo durante los últimos años, que responde a la necesidad de contar con unas Fuerzas Armadas capaces de asumir la “gran variedad” de funciones encomendadas.
PRESTIGIO FUERZAS ARMADAS
El Rey realzó la “integridad”, la “fiel entrega” al cumplimiento de las obligaciones castrenses y la “vocación de servicio” como los valores que convierten a las Fuerzas Armadas en un “verdadero ejemplo” para la sociedad.
Afirmó que el “primer y más fundamental deber del militar” es su disposición a defender a España y arriesgar la vida en aras de la seguridad y protección del país, lo que le sirvió para recordar “con pena” a todos aquellos militares que han muerto en acto de servicio a lo largo de 2016.
“Su entrega noble, generosa –y a veces heroica- deberá ser siempre valorada y recordada con honra, con gratitud y con emoción. A sus familias, hoy, de manera especial, les dedicamos nuestro cariño”, dijo.
Tras recordar que 2016 pasará a la Historia por ser el año en el que se conmemoró el cuarto centenario de la muerte de Miguel de Cervantes (1547-1616), “soldado en Lepanto”, que afirmó que “las armas tienen por objeto y fin la paz, que es el mayor bien que los hombres pueden desear en esta vida”, el Rey animó a los miembros de las Fuerzas Armadas a seguir trabajando “desinteresadamente” al servicio de España y los españoles.
El Monarca concluyó su discurso entonando un viva a España que fue replicado por un viva el Rey de los presentes en el acto.

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