El pleno municipal aprobó el 8 de marzo (con los votos a favor de ICV-EUiA, PSC, ERC, Se Puede El Prat y Guanyem) una moción para la adhesión del municipio a "la campaña Boicot, Desinversión y Sanciones contra el apartheid israelí" en respuesta a la situación que se vive en los territorios ocupados.
Con la moción, el consistorio se comprometía a no establecer convenio, trato o acuerdo político, institucional, comercial, agrícola, educativo, cultural, deportivo ni de seguridad con instituciones, empresas y organizaciones israelíes hasta que Israel no respete los derechos humanos, reconozca la autodeterminación palestina y acate el derecho internacional, según decía el texto.
El abogado Maxo-Messod Benalal interpuso un recurso de amparo sobre los derechos fundamentales de la persona en contra del acuerdo del Pleno, solicitando que se suspendiera la moción.
En una interlocutoria de agosto, el Juzgado Contencioso Administrativo 14 de Barcelona acordó suspender la moción y pidió al Ayuntamiento que cumpliera esta decisión.
Tras recibir la interlocutoria judicial, el alcalde, Lluís Tejedor, suspendió la moción y acordó dar cuenta al Pleno municipal de su decisión, según han informado fuentes municipales.
El 13 de septiembre, el Pleno del Ayuntamiento ratificó el decreto de Alcaldía por el que se suspendió la moción.
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