BARBERÁ. EL PP ADMITE QUE QUIZÁS DEBERÍA HABER “AMPARADO” A RITA BARBERÁ

El portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Rafael Hernando, admitió este viernes que su partido “quizás” pudo equivocarse con la “reflexión” que hizo en torno a Rita Barberá y “a lo mejor” debería haberla “amparado”.
Así se pronunció en una entrevista en TVE recogida por Servimedia, donde explicó que el PP invitó a Barberá a irse de sus filas para “protegerla” y también porque estaba “siendo utilizada” para dañar al partido liderado por Mariano Rajoy cuando estaban pendientes los procesos electorales de Galicia y el País Vasco.
En este sentido, explicó que el PP buscó entonces que Barberá “dejara de ser el centro de las preguntas políticas de ese momento” y que su caso no se utilizara como “munición” por parte de otras formaciones “para atacar” a Alberto Núñez Feijóo y Alfonso Alonso, que se presentaban a los comicios del 25-S. “Había un interés compartido de todos”, indicó Hernando.
“Yo creo que ahora, visto lo que ha sucedido, quizás nos equivocáramos con aquella reflexión que hicimos con ella. A lo mejor debíamos haberla amparado”, reconoció el portavoz parlamentario de los populares, para seguidamente hacer hincapié en que “no había sido condenada por nada” y la acusación pendiente sobre ella “era un asunto de si había dado un donativo”.
Dicho esto, se preguntó si es “lícito” convertir a una persona en objeto de un “linchamiento político y mediático”. “Esto no se lo merece nadie”, reflexionó. “Creo que se ha hecho del acoso a Barberá un espectáculo que supongo que a lo mejor producía buenas audiencias, pero creo que las consecuencias hay que analizarlas”, sostuvo.
“Había también quien nos pedía que o esta persona se iba del partido o España se quedaba sin Gobierno”, destacó Hernando, al tiempo que pidió mirar “hacia el futuro” sin utilizar los tribunales como un “elemento para desacreditar al adversario con acusaciones falsas”.
Por último, dijo que espera que los diferentes partidos puedan llegar a acuerdos para seguir avanzando en materia legislativa de forma que se pueda llegar “a un sistema de enjuiciamiento rápido en estos casos de corrupción”, porque uno de los elementos “esenciales” de la Justicia es que sea “rápida y ágil” para no dejar en el “limbo” estas situaciones.