La CMRE aprueba una declaración consensuada para reclamar una verdadera política común de asilo en la UE

EUROPA PRESS

De la Serna ha presidido el congreso que el CMRE, la asociación de municipios y federaciones de municipios más importante de toda Europa, celebra en Nicosia (Chipre) y ha intervenido, además, en la sesión de ONU-Habitat dedicada la uso de las tecnologías smart en la gobernanza local y regional.

El alcalde ha señalado que él mismo "se había implicado de manera personal" para tratar de alcanzar un acuerdo que permitiera que el congreso del CMRE aprobara una declaración conjunta, después de haber tratado de consensuar una, sin éxito, en el encuentro que tuvo lugar recientemente en París.

"Nos habíamos marcado el objetivo de presentar un texto que concitara el consenso de todos los municipios europeos y poder salir con un acuerdo de este Congreso del CMRE", ha apuntado el presidente del Consejo de Municipios y Regiones de Europa en un comunicado de prensa.

De la Serna ha destacado la importancia de que Santander participe de manera directa y tenga protagonismo en órganos internacionales que, como el CMRE, expresan la voz de los municipios ante la Unión Europea y tienen capacidad de trasladar las necesidades y propuestas de las entidades locales y regionales a los organismos comunitarios.

En este sentido, ha hecho hincapié en "el orgullo que supone para la ciudad" presidir el mayor encuentro de municipios y regiones de Europa, al tiempo que ha subrayado el "prestigio" que conlleva estar al frente de este organismo.

"Supone el mayor hito político de nuestra historia", ha remarcado De la Serna, quien ha añadido que Santander "sigue potenciado su posicionamiento internacional, dándose a conocer fuera de España y ganando peso institucional y político en el ámbito europeo".

COMPROMISO CON LOS VALORES HUMANOS

El documento aprobado expresa el compromiso con los valores humanos que subyacen en el proyecto comunitario de la Unión Europea y subraya la necesidad de que los estados miembros sean solidarios entre sí en este sentido.

Asimismo, recuerda que, para que la integración tenga éxito, es necesario que los refugiados respeten los valores europeos, en particular los derechos humanos y la igualdad de género.

Los miembros del CMRE defienden que la crisis de los refugiados debe resolverse a nivel europeo, a través de una ley comunitaria de asilo que involucre a todos los estados y, en este sentido, se congratulan de las recientes propuestas de la Comisión Europea de reformar el sistema de asilo de la UE y de desarrollar vías legales y seguras de acceder a Europa.

Expresa su completa solidaridad con los alcaldes de toda Europa y los Balcanes, así como de Turquía y Oriente Medio, incluidos Líbano y Jordania, que acogen refugiados en sus municipios; y reafirma su apoyo a las medidas dirigidas a combatir las causas de esta crisis humanitaria en los países de origen.

Los municipios adheridos a la declaración reclaman a la Unión Europea y los estados miembros que respeten la autonomía local y regional y que aseguren los medios necesarios para la recepción de refugiados, con financiación para los gobiernos locales y regionales de acogida, y un diálogo permanente con los gobiernos estatales sobre los procedimientos a seguir.

Confirman el compromiso de los gobiernos locales y regionales para que, equipados con los recursos y apoyos necesarios, pongan en marcha las medidas apropiadas para alcanzar, con éxito, la integración de los refugiados.

MEDIDAS CONCRETAS EN FINANCIACIÓN, SEGURIDAD E INTEGRACIÓN

Respecto a la financiación, recomiendan adaptar los programas operativos y fondos estructurales actuales para que puedan cubrir costes de los gobiernos locales y regionales asociados a medidas para fomentar la integración a medio y largo plazo, que habitualmente están ligados a servicios de interés general, como la sanidad, los servicios sociales, la educación, etc.

Además, proponen que se ofrezca la posibilidad de invertir recursos financieros de los presupuestos públicos en crear y fortalecer dotaciones para acoger e integrar a refugiados.

En cuanto a la seguridad, piden un estrecho control de los países de origen seguros bajo las leyes internacionales, con el fin de evitar expulsiones colectivas ilegales a zonas en guerra y plantean establecer una lista, a nivel europeo, para acelerar los procesos de registro.

Otra de las acciones en las que hace hincapié el CMRE es en agilizar los procesos para obtener protección internacional, con la vista puesta en trasladar a los refugiados al lugar de destino designado por la Unión Europea lo antes posible, preferiblemente tras consultar al propio refugiado y al país de acogida.

También piden tener en cuenta de manera especial a los menores no acompañados y sus derechos, con el fin de garantizar su protección y el establecimiento de mecanismos justos y permanentes para su reubicación en los países miembros de la Unión Europea, puesto que son particularmente vulnerables a los abusos y la explotación.

Expresan la necesidad de que las medidas de protección para las mujeres, que también constituyen un grupo que se encuentra expuesto al riesgo de abusos y al tráfico de seres humanos.

En cuanto a la integración, el CMRE reclama que se incrementen los esfuerzos encaminados a una mejor coordinación de las acciones, a través del diálogo entre los gobiernos locales, regionales y nacionales, para que los refugiados se distribuyan de una manera solidaria entre las regiones y municipios europeos.

Proponen que los gobiernos centrales apoyen a los locales y regionales para evitar la saturación de los servicios de bienestar social y el riesgo potencial de aumento de la xenofobia, y que se invierta en educación y para incentivar el acceso de los refugiados, y especialmente las mujeres, al mercado laboral.

Prestar especial atención a la prevención de conflictos en todos los niveles de gobierno (local, regional y estatal) para promover el diálogo entre las comunidades de acogida y los refugiados y evitar el rechazo, la xenofobia o la potencial radicalización es otra de las medidas que recoge el acuerdo.

Finalmente, establece la necesidad de crear una plataforma específica entre los miembros del CMRE y las instituciones europeas para el intercambio de experiencias y buenas prácticas, centradas en la integración de los refugiados.

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