COSPEDAL LAMENTA QUE “ALGUNOS” SE ALARMEN POR INSULTOS A BARKOS Y NO SE “ESCANDALICEN” POR LAS AMENAZAS A PERIODISTAS

La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, llamó la atención este martes sobre el hecho de que haya quien se alarme por los insultos que ha recibido la presidenta de Navarra, Uxue Barkos, por parte de una serie de militares y no se “escandalicen” por las amenazas que sufren algunos periodistas por parte de determinados dirigentes de Podemos.
Así se pronunció Cospedal, en la sesión de control al Gobierno en el Senado, en respuesta al senador de Podemos Ignacio Bernal quien le recordó unos hechos protagonizados por militares que enviaron una serie de correos electrónicos a Barkos en los que se la calificaba de “puta” por haber organizado un acto institucional de reconocimiento y reparación a las víctimas de violencia política ejercida por policías o grupos de extrema derecha.
Ni la Audiencia Nacional ni la Policía consideraron estos correos constitutivos de delitos, mientras que el Parlamento navarro aprobó por unanimidad una declaración institucional que rechaza los insultos recibidos por Barkos.
Ante esta situación, Bernal preguntó a Cospedal si ha llamado a Barkos para solidarizarse por su situación y si habría actuado “con la misma pasividad si los insultados fueran la reina Letizia, la despechada reina Sofía o la Infanta que no sabe lo que firma”.
También insistió en que “estas personas que insultan, aunque están jubilados, han portado armas y tienen mucha influencia sobre otras personas”, por lo que abogó por el desarrollo de “elementos sancionadores para estas personas aunque estén jubilados”.
Cospedal sostuvo que los insultos que recibió Barkos procedieron de “militares retirados, jubilados”, es decir, de personas que “no están sujetas a la disciplina ni a la ley ni al Código Penal militar” y ante los que Defensa “no tiene competencias para actuar sobre ellos”.
Tras condenar “rotundamente” los insultos recibidos por Barkos, consideró “increible” que “algunos” se “alarmen por hechos tan graves” y “que nadie se escandalice cuando algunos dicen que les gustaría azotar a periodistas hasta verlas sangrar” (en referencia a un comentario del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, sobre la periodista Mariló Montero).

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