Con esta iniciativa, consecuencia de una interpelación al ministro de Fomento, Iñigo de la Serna, ERC busca la desaparición de símbolos religiosos de escuelas y edificios públicos, que los funerales de Estado sean laicos, que los cargos públicos no participen en ritos religiosos durante su actividad profesional, que el Estado no sea recaudador de las donaciones y que éstas no corran a cuenta de los impuestos de los ciudadanos, entre otras cuestiones.
El partido republicano ha sacado adelante esta moción, finalmente, tras conseguir el apoyo del PSOE, cuyo voto quedó en el aire durante el debate del pasado martes, después de que ERC no aceptara una enmienda socialista para añadir el fin de la práctica militar de ondear a media asta la bandera en Semana Santa.
UNA LEY QUE CUMPLE SU COMETIDO
"Es una enmienda muy acertada pero no es el momento discutir si estamos de acuerdo o no", explicó en el debate el defensor de la iniciativa, Joan Tardà.
Por su parte, PP y Ciudadanos han votado en contra de esta moción de ERC, mientras que PNV se ha abstenido. Todos ellos han considerado que la actual ley de libertad religiosa cumple con su cometido. Mientras, Unidos Podemos se ha mostrado a favor porque, según su portavoz, Manuel Monereo, es necesario discutir la situación de "enormes privilegios" de la Iglesia Católica en el país.
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