Correos electrónicos filtrados amenazan unidad del Partido Demócrata

Unos 20.000 correos electrónicos de líderes demócratas, publicados el viernes por Wikileaks, alimentaron en Estados Unidos la polémica de la posible parcialidad de la dirección del Partido Demócrata durante las primarias para elegir a su candidato a la Casa Blanca.

El paquete de 19.252 correos se filtró dos días antes de que se inicie la convención demócrata en Filadelfia, en la que Hillary Clinton será oficialmente designada por su partido como candidata a la presidencia, y después de que su rival en las primarias, Bernie Sanders, expresara su apoyo sin entusiasmo.

Un día después de la filtración, Clinton anunció que el senador por Virginia Tim Kaine será su compañero de fórmula para la vicepresidencia.

El director de finanzas de su partido, Brad Marshall, pidió el 5 de mayo pasado en un mensaje electrónico a sus colaboradores que designaran "a alguien para que le cuestione sus convicciones", en los conservadores estados de Kentucky y Virginia Occidental, a alguien a quien no cita pero que se intuye que podría ser Sanders.

"Se limitó a decir que tiene herencia judía", indica el mensaje, que agrega: "Creo haber leído que es ateo. Esto podría hacer varios puntos de diferencia con mi gente. Los míos (de la iglesia) bautista harían una gran diferencia entre un judío y un ateo".

Durante las primarias, Sanders, senador por Vermont, criticó en numerosas ocasiones al partido por su parcialidad.

Sanders afirmó que, de llegar a ser presidente, no mantendría en su puesto a Debbie Wasserman-Schultz, presidenta del partido. Una declaración que generó un intercambio de correos en el seno de la formación. Debbie Wasserman-Schultz dijo tajante en un correo que eso "es una historia absurda. Él no va a ser presidente".

Los opositores a Hillary Clinton se sumaron inmediatamente a la polémica, Donald Trump entre ellos.

"Los correos del partido demócrata muestran las intenciones de destruir a Bernie Sanders", dijo Trump en un tuit, en el que consideró "brutal" que se hayan burlado de la herencia cultural de Sanders.

El jefe de la campaña de Sanders, Jeff Weaver, pidió explicaciones sobre la creciente controversia este sábado, en una entrevista con el canal ABC News.

"Alguien tiene que rendir cuentas", dijo Weaver, quien afirmó que los emails parecían mostrar mala praxis en las altas esferas de la formación política.

"Tenemos un proceso electoral. El Partido Demócrata, de acuerdo con sus estatutos, tiene que ser neutral con los candidatos. Claramente no lo fue", apuntó Weaver durante la entrevista.