Con las primeras gestiones se logra identificar al hombre que apuntan las informaciones, al cual ya le constan antecedentes por tráfico de drogas, pudiendo comprobar como el 'modus operandi' del investigado consiste en salir de su domicilio, adoptando extremas medidas de seguridad, para evitar ser objeto de seguimiento policial, ha informado la Delegación del Gobierno en nota de prensa.
Cuando piensa que no es seguido, el detenido se dirige a locales de ocio, donde entra y sale, en apenas unos minutos, facilitando sustancia estupefaciente a personas en su interior. En otras ocasiones son los consumidores los que se dirigen al domicilio del investigado, y éste les proporciona la sustancia estupefaciente.
De este modo, se llevó a cabo la entrada y registro en el domicilio del detenido al objeto de investigación, donde se intervienen 33 gramos de cocaína, así como efectos relacionados con la venta de sustancias estupefacientes.
Entre estas se encuentra una báscula digital de precisión, recortes de plástico, anotaciones de la actividad ilícita desarrollada, y tijeras, encontrándose todo ello en un maletín metálico que estaba en la ventana de la cocina, y que el investigado trató de tirar en el momento de efectuarse la entrada y registro, lo cual es impedido por los Agentes de Policía actuantes.
Por todo ello, se detuvo al investigado, y posteriormente, se puso a disposición judicial del Juzgado de Instrucción en funciones de Guardia de Ciudad Real.
La investigación ha sido llevada a cabo por el Grupo de Estupefacientes de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Ciudad Real
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