"Un resultado muy decepcionante para mi PvdA pero la amplia mayoría de los electores han rechazado a los populistas extremos", ha afirmado Dijsselbloem, en un mensaje publicado en su cuenta oficial de la red social Twitter. En su opinión, el hecho de que el populismo no haya ganado los comicios "da esperanza para el futuro".
Los malos resultados electorales del Partido Laborista holandés en las elecciones del miércoles, en las que ha logrado nueve escaños frente a los quince que consiguió en las anteriores, podrían tener como consecuencia que el propio Dijsselbloem no continúe en el cargo de ministro de Finanzas en el nuevo gobierno de coalición que formará el primer ministro, Mark Rutte.
Rutte ha sido el ganador de las elecciones, con 33 escaños, seguido por el partido del ultraderechista Geert Wilders, que ha logrado 20 escaños y se sitúa como segunda fuerza parlamentaria. Rutte deberá pactar con varias formaciones más para poder conformar un nuevo gobierno de coalición.
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