Dimite un vicegobernador turco tras advertir de "una guerra civil" si gana el 'no' en el referéndum

  • Un vicegobernador provincial del gubernamental Partido Justicia y Desarrollo (AKP) ha dimitido este jueves tras advertir de "una guerra civil" si la reforma constitucional no era aprobada en referéndum".
EUROPA PRESS

Ozan Erdem, 'número dos' del AKP en la provincia turca de Manisa, dijo que "si no se supera el 50 por ciento (de los votos) y se fracasa (al aprobar la reforma) en el referéndum, hay que prepararse para la guerra civil".

Erdem ha anunciado su dimisión durante la jornada, si bien ha recalcado que sus palabras "fueron manipuladas", según ha informado el diario turco 'Hurriyet'.

El jefe de organización del AKP, Mustafá Atas, había tildado durante la jornada las palabras de Erdem de "inaceptables", pidiéndole que dimitiera.

Por su parte, el gobernador de Manisa, Berk Mersinli, ha asegurado que las palabras de su 'número dos' no reflejan la opinión del partido, reconociendo que fueron "desafortunadas".

En las últimas semanas, varios altos cargos del Gobierno han creado polémica con sus declaraciones sobre el referéndum, entre ellos el primer ministro, Binali Yildirim, quien ha vinculado a los que apoyan el 'no' con el "terrorismo", incluyendo al principal partido opositor, el Partido Republicano del Pueblo (CHP).

"¿Quién dice 'no' a estos cambios (constitucionales)? El PKK (Partido de los Trabajadores del Kurdistán) y la FETO (la Organización Terrorista Fetulenista). Son terroristas, y por supuesto decimos 'sí' a lo que ellos dicen 'no'", dijo la semana pasada.

"¿Quién más hace campaña por el 'no'? El HDP (el prokurdo Partido Democrático de los Pueblos) y el CHP. Parece que el CHP se ha subido a la misma barca que el HDP, que saca su fuerza de una organización terrorista --en referencia al PKK--", agregó.

En respuesta, el vicepresidente del CHP, Ozgur Ozel, cargó contra Yildirim, argumentando que acusó a todos los que estaban en contra de la reforma de apoyar a los "terroristas".

Por su parte, el presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, se ha expresado en la misma línea que su primer ministro, afirmando que "el camino del 'sí' tiene como objetivo oponerse a los que rechazan la bandera".

LA REFORMA CONSTITUCIONAL

El Parlamento aprobó un total de 18 enmiendas propuestas por el gubernamental Partido Justicia y Desarrollo (AKP), que contó con el apoyo del opositor Partido de Acción Nacionalista (MHP).

La reforma de la Constitución ideada por el AKP convertirá la Presidencia en un auténtico poder ejecutivo, algo que preocupa a la oposición por la deriva autoritaria de Erdogan.

El proyecto elimina el puesto de primer ministro, rebaja de 25 a 18 la edad mínima para presentarse al Parlamento, e incrementa el número de parlamentarios de 550 a 600, entre otros puntos.

El acuerdo entre el AKP y el MHP se basa en tres puntos. El primero, y más importante, es que Erdogan no podrá hacer uso de sus nuevos poderes ejecutivos hasta 2019.

Además, sus decretos deberán ser transformados en leyes por el Parlamento. Por último, el partido gobernante ha accedido a reducir el quórum para procesar al presidente ante el Consejo Supremo.

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