El director general de la Benemérita, Arsenio Fernández de Mesa, ha justificado las medidas cautelares de revocación de destino e inicio de los trámites para suspensión de funciones adoptadas de forma inmediata contra el agente acusado de un delito de agresión sexual en Pamplona, durante las fiestas de San Fermín, y ha afirmado que es "lo mínimo que se puede hacer".
"De manera inmediata se han tomado medidas cautelares de separación del servicio, que es lo mínimo que se puede hacer, no sólo por la alarma social que pueda generar sino porque de un representante de una institución como esta, que se dedica precisamente a perseguir el delito y a los delincuentes, no puede estar aliado con ellos", ha afirmado este martes en Santander Fernández de Mesa.
El director de la Guardia Civil, que ha presidido la toma de posesión del nuevo responsable de la Benemérita en Cantabria, ha explicado que en el momento en que haya sentencia judicial y se tenga "conocimiento efectivo" de lo que ha ocurrido, el Instituto Armado tomará "las medidas correspondientes" definitivas.
Y es que, según ha explicado, hasta adoptar estas medidas definitivas, "habrá que esperar" hasta que haya esa sentencia puesto que la tramitación del expediente queda suspendida hasta ese momento.
Ya ayer lunes la Guardia Civil anunció en un comunicado las medidas cautelares adoptadas contra el agente acusado.
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