FAES DESIGNA UN PATRONATO SIN POLÍTICOS EN ACTIVO

- Con la entrada en vigor de los nuevos estatutos la fundación ya no está vinculada al PP. El expresidente del Gobierno y presidente de la Fundación FAES, José María Aznar, ha designado a los miembros del nuevo Patronato de la fundación, en el que no hay políticos en activo. En la reunión celebrada esta tarde ha informado de la entrada en vigor de los nuevos estatutos, por los que FAES queda desvinculada de cualquier partido político.
El nuevo órgano de gobierno de FAES está presidido por José María Aznar y tiene como vicepresidente a Manuel Pizarro, mientras que el secretario y director de la Fundación sigue siendo Javier Zarzalejos.
Entre los vocales figuran Ángel Acebes, Rocío Albert, Cayetana Álvarez de Toledo, Rafael Arias-Salgado, Pío Cabanillas, Cristina Crespo Palomares, Gabriel Elorriaga, Javier Fernández-Lasquetty, Julio Iglesias de Ussel, José María Marco, Abel Matutes, Jaime Mayor Oreja, Ana Palacio, José Pedro Pérez-Llorca, Josep Piqué, Alberto Ruiz-Gallardón, Javier Rupérez, María San Gil, Alfredo Timermans y Eduardo Zaplana.
FAES tomó la decisión de renunciar, a partir de enero de 2017, a las subvenciones públicas que percibía como fundación vinculada al PP, decisión que quedó plasmada con el acuerdo que firmaron ambas partes el pasado mes de septiembre y que ratificó el Patronato de la fundación.
El acuerdo establecía que el PP renuncia a los miembros que hasta ahora le correspondían como vocales natos, que la fundación mantiene su presencia en las organizaciones internacionales a las que pertenece, y que ambas partes se muestran abiertas a seguir colaborando en el futuro desde sus respectivos ámbitos.
Durante más de 25 años, FAES realizó su actividad de estudio, debate y reflexión como fundación política vinculada al PP. Esta vinculación ha respondido al modelo contemplado en la Ley Orgánica de Financiación de Partidos Políticos basado en una financiación fundamentalmente pública. La Fundación FAES comunicó el 3 de octubre que, “por diferentes razones”, entiendía que ese modelo de financiación pública ya no era “el adecuado ni a las circunstancias actuales ni para el futuro de la fundación” y por ello consideró que lo más oportuno era desvincularse de cualquier organización política.