En su declaración como testigo en el juicio al expresidente Artur Mas y las exconselleras Joana Ortega e Irene Rigau, Martínez ha explicado que actuaron en base a un contrato con la Conselleria de Presidencia y que a su vez subcontrataron a Fira de Barcelona, donde está el pabellón.
El fiscal Emilio Sánchez Ulled le ha preguntado por qué la fecha que aparece en el contrato es el 3 de noviembre cuando existe un correo electrónico remitido por una empleada de Fira a empleados de Focus con la indicación expresa de cambiar la fecha del 7 al 3: Martínez ha respondido que es un "desfase habitual".
Lo ha justificado diciendo que se pidió modificar la fecha porque "no se ajustaba" a la realidad del contrato, que en realidad se hizo efectivo el día 3 y no el 7.
Martínez ha añadido que Focus firmó el contrato físicamente el día 7, pero la contraparte no lo había firmado, ya que no hubo "unidad de acto".
La Fiscalía cree que de la existencia de un mensaje con la indicación expresa de cambiar la fecha al contrato "se desprende la voluntad inequívoca de enmascarar su carácter posterior a la suspensión constitucional el 4 de ese mes".
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