Haftar aplaude al gobierno de unidad por expulsar de Trípoli a las milicias vinculadas a Gwell

  • El mariscal de campo Jalifa Haftar, quien encabeza a las tropas leales al gobierno asentado en el este de Libia, ha aplaudido este martes al gobierno de unidad por expulsar de la capital, Trípoli, a las milicias vinculadas con el golpista Jalifa Gwell.
EUROPA PRESS

En su comunicado, ha afirmado además que las tropas que le son leales y se encuentran en el oeste de Libia deben prepararse para entrar en Trípoli y liberar la capital de "partidos islamistas".

Asimismo, ha denunciado la entrada en el país de "ciudadanos de Chad, Sudán y otros países africanos y árabes" tras "recibir dinero de Qatar y otros países y grupos terroristas", según ha informado el diario local 'The Libya Herald'.

El comunicado de Haftar ha sido publicado apenas un día después de que Gwell, líder del autoproclamado Gobierno de Salvación Nacional de Libia, asegurara que sus tropas se habían retirado de Trípoli para proteger la ciudad de nuevos daños.

Gwell, quien en octubre de 2016 encabezó un golpe de Estado contra el gobierno de unidad surgido tras un acuerdo que contó con la mediación de Naciones Unidas, acusó al Consejo Presidencial --parte del gobierno de unidad-- de "comprar" milicias responsables de la inseguridad, tildando al organismo de "consejo de la desgracia".

Las milicias leales a Gwell se habrían retirado hacia las localidades de Zawia, Sabraza y Tarhuna. De esta manera, las brigadas presentes en la capital respaldan al gobierno de unidad.

El domingo, las milicias leales al gobierno de unidad tomaran la carretera que conecta la capital con su aeropuerto internacional tras la retirada de varias brigadas aliadas con Gwell.

El gobierno de unidad surgido tras un acuerdo mediado por Naciones Unidas se instaló hace meses en la capital, Trípoli, para intentar unificar el país políticamente, aunque por el momento la situación sigue altamente fragmentada.

Haftar y el gobierno asentado en el este del país se han negado a reconocer la autoridad del gobierno de unidad, y propio Haftar ha tildado de "terroristas" a las tropas leales al mismo.

Sin embargo, la situación sufrió un cambio a principios de mes después de un encuentro entre Haftar y el primer ministro del gobierno de unidad, Fayez Serraj, en la que acordaron celebrar elecciones antes de marzo de 2018. El pacto no ha sido aún ratificado.

Por contra, Gwell rechazó el acuerdo y pidió un proceso interno para resolver la fragmentación que sufre el país, con tres gobiernos.

El intento de golpe estuvo encabezado por Gwell --quien ya fuera primer ministro de otro gobierno autoproclamado con sede en Trípoli--, quien ganó apoyos en las semanas posteriores gracias a los crecientes respaldos anunciados por diversas milicias que operan en el oeste del país y en la propia capital.

La situación se ha deteriorado en las últimas semanas, especialmente después de la toma por parte de una brigada aliada al gobierno de unidad de la base aérea de Brak al Shati, que se habría saldado con al menos 140 muertos.

La base de Brak el Shati fue tomada el 19 de mayo por la Brigada 201 --anteriormente Tercera Fuerza--, integrada en el Ministerio de Defensa del gobierno de unidad, con el respaldo del Consejo de la Shura de los Revolucionarios de Benghazi (CSRB).

La base se encontraba hasta entonces bajo control de las tropas de la conocida como 'Operación Dignidad', encabezada por Haftar, provocando un aumento de las tensiones entre éste y el gobierno de unidad.

Mostrar comentarios