Ahmadineyad no ha anunciado ningún plan para presentarse a las elecciones de mayo, pero ha dado varios discursos en los últimos meses, generando especulaciones de que podría volver a la política.
Los expertos han sugerido que Ahmadineyad, un populista incendiario que de forma frecuente enfureció a Occidente con su retórica durante sus ocho años en el cargo, sería la mejor opción de los conservadores para recuperar el poder.
Pero la instrucción de Jamenei, de la que informa la agencia estatal IRNA, destruye de forma efectiva sus opciones de conseguir el amplio respaldo que necesitaría para ofrecer una candidatura con éxito.
Ahmadineyad "vino a mí y le dije que no se presentara ya que creo que no está en su interés ni en el del país", ha afirmado Jamenei. "Crearía opuestos y divisiones bipolares en el país algo que creo que es dañino", ha añadido el líder supremo.
La popularidad de Rohani ha aumentado después de que el año pasado cerrara un acuerdo con las potencias mundiales que puso fin a buena parte de las sanciones sobre Irán a cambio de que limitara su programa nuclear.
Otro potencial rival, el comandante de la Guardia Revolucionaria Qassem Soleimani, la cara más conocida de la lucha contra Estado Islámico en Irak y Siria, dijo este mes que no se presentaría a las elecciones.
Ahmadineyad fue elegido por primera vez presidente en 2005. Su disputada victoria en 2009 provocó las mayores protestas en la República Islámica y una ola de represión en la que murieron varias personas y cientos más fueron detenidas.
La legislación iraní prohíbe a un presidente optar a un tercer mandato consecutivo, pero Ahmadineyad podría presentarse de nuevo dado que entre medias ha habido un mandato de Rohani.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios