La Junta lamenta que el Gobierno central "vuelve a reservarse el margen más amplio del déficit"

La Junta de Andalucía lamenta que la nueva senda de reducción de déficit fijada en el Programa de Estabilidad 2016-2019, aprobada por el Consejo de Ministros, evidencia que el Gobierno central "vuelve a reservarse el margen más amplio de déficit" y obliga a realizar el mayor esfuerzo de reducción a las comunidades autónomas".

De esta forma, critica que la preocupación del Gobierno es "mantener este mayor margen, en lugar de ver que lo importante no es quien recorta sino dónde se recorta", que es el debate que pide Andalucía.

Considera que "la opacidad en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), en el que el Gobierno no ofreció ningún dato sobre el Plan de Estabilidad, más allá de la senda que otorga a las autonomías, es el nuevo agravio de hoy" porque, conforme a los nuevos objetivos conocidos, la Administración central reducirá su déficit al 1,5 por ciento del PIB en 2017, del 1,1 por ciento en 2018 y del 0,9 por ciento en 2019, mientras que las comunidades tendrán que rebajarlo al 0,5 por ciento en 2017, 0,3 por ciento en 2018 y cero por ciento en 2019.

De esta forma, apunta que en 2017 la Administración central "aumenta en cuatro décimas su margen de déficit hasta el 1,5 por ciento, mientras que las comunidades autónomas tendrán que reducirlo al 0,5 por ciento". Además, hasta 2018, la Administración central "se reserva de manera prácticamente invariable la mitad del margen de déficit disponible --alrededor del 50 por ciento-- y solo el resto de sectores de la Administración va disminuyendo su peso en el déficit".

De hecho, la Junta lamenta que las comunidades "reducen su peso desde el 19,4 por ciento que suponen en 2016 hasta el 13,6 por ciento en 2018, dejando de tener participación en el déficit en 2019 (se exige el equilibrio), mientras que la Administración Central y la Seguridad Social continúan repartiéndose el margen de déficit".

"El Gobierno de Rajoy se empeña en cargar sobre las comunidades la parte más dura del ajuste, manteniendo este reparto desequilibrado, a pesar de que las autonomías gestionan el 33 por ciento del gasto, que corresponde con partidas tan sensibles como la sanidad o la educación", se lamenta la Junta, que critica que el Gobierno "se resiste a abordar el debate que demanda Andalucía, que considera que importante es poner el acento no en quién recorta, sino en determinar en qué políticas se pueden realizar mayores ajustes y qué elementos hay que preservar porque garantizan la igualdad de los ciudadanos".

Considera que "es lamentable que el Gobierno convocara a las comunidades y después no ofreciera datos, negándose a debatir abiertamente con las comunidades autónomas sobre la reducción del déficit, con un planteamiento opaco e insuficiente que demuestra que carece de ambición a la hora de negociar más margen con Bruselas. Por eso, Andalucía votó en contra porque temía lo que hoy se ha puesto de manifiesto, que el Estado se ha vuelto a reservar la parte más cómoda del ajuste", ha aseverado la Junta.

Lamenta que el Gobierno "ha vuelto a utilizar la rueda de prensa del Consejo de Ministros para hacer campaña en vez de pensar en el interés general de los ciudadanos y en intentar que la recuperación llegue a las familias". "Se empeña en dibujar un horizonte ideal para 2019, cuando lo que toca es hacer balance de cuatro años de fracaso económico y sufrimiento social", apunta la Junta.