Justicia española decidirá en breve si extradita a militar argentino buscado por genocidio

El militar argentino retirado Jorge Pedro Rodolfo Wagner, reclamado por su país por un presunto delito de genocidio durante la última dictadura militar (1976-1983), compareció este jueves ante la justicia española, que decidirá en breve si lo extradita.

Wagner, de 71 años de edad y residente en España, está acusado en Argentina de homicidio, privación ilegítima de libertad y tormento (torturas).

En su turno de palabra, Wagner, vestido de traje de chaqueta gris y corbata azul, no quiso hacer ningún comentario.

Fue detenido en marzo en Madrid en virtud de una orden de Interpol emitida a instancias de las autoridades argentinas, y liberado poco después con medidas cautelares.

En una vista en la Audiencia Nacional, máxima instancia penal española, la fiscalía pidió este jueves la extradición, al considerar que Argentina ha presentado una "suficiente relación" de los "hechos gravísimos" que se le atribuyen.

El fiscal estimó que el acusado participó en la represión de parte de la población "por razones políticas", lo que es "perfectamente aplicable a un delito de genocidio".

Wagner, de nacionalidad argentina y alemana, está acusado de delitos de lesa humanidad en un caso que se dirime en Mendoza, a 1.000 km al oeste de Buenos Aires.

Igualmente está imputado por la desaparición en 1976 en San Juan (1.300 km al oeste de la capital) de la joven francesa Marie-Anne Erize, una de los 30.000 desaparecidos que dejó el régimen militar.

Wagner, por entonces capitán, era jefe del Destacamento de Inteligencia en Mendoza que tenía jurisdicción sobre la vecina provincia de San Juan durante la dictadura.

Su abogado, Joaquín Burkhalter, indicó en la vista de este jueves que los documentos presentados por Argentina para pedir la extradición no facilitan "un solo dato con la precisión requerida" sobre su implicación concreta en los hechos incriminados.

Esa "falta de concreción", dijo, "es un primer obstáculo para poder conceder la extradición" de su cliente, que según él sólo se dedicó en ese destacamento a tareas "logísticas" y no operativas.

Además, aseguró que la calificación de "genocidio" no aparece en la demanda de extradición, y consideró que la justicia española no debería contemplar de manera retroactiva la figura de lesa humanidad, que entró en la legislación española en 2004.

Burkhalter hizo valer que Wagner vive en España con su mujer, de nacionalidad española, y sus dos hijos, que está siendo tratado por un cáncer y que por todo ello merecería mecanismos "más proporcionados" que la extradición, como por ejemplo una eventual comisión rogatoria enviada por Argentina, donde no existe el juicio en ausencia.

Según dijo Burkhalter a la AFP, el plazo legal para que la Audiencia Nacional decida si extradita o no a su cliente es de tres días, aunque espera más bien que la decisión se conozca en un plazo de entre una y dos semanas.

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