El líder de Sendero Luminoso pide que no lo citen más a juicio en Perú

  • El abogado de Abimael Guzmán, condenado a prisión perpetua, pidió que no se le cite más al juicio por un atentado que dejó 25 muertos en 1992.

    Tanto el como su esposa, Elena Iparraguirre, también condenada a cárcel de por vida, han decidido no seguir concurriendo a la audiencia pues consideran que no se ha respetado el debido proceso.

L.I.

El líder del grupo maoísta Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, condenado a prisión perpetua, pidió que no se le cite más al juicio que se le sigue en Perú por un atentado que dejó 25 muertos en 1992, informó el lunes su abogado.

En un comunicado, el letrado Alfredo Crespo informó que tanto Guzmán como la esposa de este, Elena Iparraguirre, también condenada a cárcel de por vida, "han decidido no seguir concurriendo" a la audiencia pues consideran que no se ha respetado el debido proceso y que los miembros del tribunal han adelantado opinión sobre su caso.

En una carta escrita y firmada por Iparraguirre, miembro de la cúpula dirigente de Sendero Luminoso, reclama falta de garantías. Sendero Luminoso es una agrupación considerada terrorista en Perú.

La semana pasada, Guzmán fue expulsado de la sesión en donde se evaluaba el caso pues los magistrados consideraron que había proferido agravios y calificó el juicio como una farsa. La audiencia debe retomarse este martes.

La Sala Penal Nacional inició en febrero un juicio oral contra Guzmán y otros once dirigentes de Sendero Luminoso, que cumplen a su vez condenas por terrorismo desde hace más de dos décadas.

Para este caso específico la Fiscalía ha solicitado para los acusados la pena de cadena perpetua como autores mediatos del ataque con coche bomba en 1992 contra un edificio residencial en el distrito limeño de Miraflores.

Dos meses después de aquel atentado, Guzmán y sus colaboradores más cercanos fueron capturados por la policía en una casa de Lima. El líder de Sendero Luminoso fue condenado por delitos de terrorismo y crímenes contra los derechos humanos por hechos cometidos entre 1980 y 1990.

Diezmada tras la captura de Guzmán, la agrupación posee remanentes en la zona central del país, que actúan en alianza con el narcotráfico, según las autoridades.

La guerra de Sendero Luminoso dejó unos 70.000 muertos entre 1980 y 2000 tras desatarse una represión militar, según un informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación.

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