París, Los Ángeles y Budapest tienen 10 meses para marcar la diferencia

París y Los Ángeles abrieron en Doha el partido entre los favoritos para lograr la organización de los Juegos Olímpicos 2024, carrera en la que también compite el 'outsider' Budapest. Serán diez meses sembrados de obstáculos para que los candidatos exhiban músculo y trabajen sus puntos débiles.

La próxima cita para las tres ciudades candidatas será el 3 de febrero. Entonces el COI habrá recibido la tercera parte de los dosieres, dedicado a la entrega de los Juegos y su herencia.

Sólo a partir de esta fecha las ciudades tendrán el derecho de promover sus dosieres en el extranjero, especialmente entre los miembros del COI que votarán el 13 de septiembre de 2017 en Lima.

El martes, durante la presentación de las candidaturas ante los delegados de la asamblea general de la Asociación de Comités Nacionales Olímpicos (ACNO), el equipo de Los Ángeles mostró toda su potencia.

Espectaculares imágenes, atletas de excepción (Janet Evans y Allyson Felix, diez medallas olímpicas entre ambas) y argumentos de choque destinados a convencer a un movimiento olímpico muy dependiente de Estados Unidos.

"Los Ángeles 2024 ayudarán a 100 millones de jóvenes americanos a seguir conectados con los Juegos y el olimpismo", señaló Casey Wasserman, presidente de la candidatura.

Poco más detrás. Ningún detalle sobre la topografía del proyecto, las distancias entre las sedes repartidas por la ciudad, el sistema de transporte en una megápolis o la herencia de los que serían sus terceros Juegos.

La falta de concreción es la principal laguna en la que la candidatura californiana deberá trabajar en los próximos meses, antes de la entrega de la tercera parte del dosier y de la visita de la comisión de evaluación, esperada a principios de mayo de 2017.

"Los Ángeles ha sido muy eficaz, con mucho glamour, pero el dosier técnico de París es mucho más avanzado", comentó el presidente de un comité olímpico europeo.

Seductor y políglota, el equipo francés presentó un dosier técnico preciso y creíble, que concentra las principales sedes olímpicas (80%) en un radio de 10 kilómetros con el corazón de París como epicentro.

Anne Hidalgo, la alcaldesa de la ciudad, y Tony Estanguet, triple campeón olímpico de canotaje y vicepresidente de la candidatura, emocionaron a los presentes con sus discursos apasionados, en español e inglés respectivamente, sobre la plusvalía que los Juegos ofrecerán a París y a Francia a largo plazo.

Entre los problemas de la candidatura está el plan de comunicación. Teddy Riner, a pesar de sus dos títulos olímpicos en judo, no tiene el peso internacional de sus homólogos estadounidenses y Francia no maneja la noción de entretenimiento con el equipo de Los Ángeles, una mezcla de Hollywood y Silicon Valley.

"2017 nos ofrecerá una ventana formidable con eventos regulares como el Tour de Francia o Roland Garros, además de campeonatos del mundo que servirán para hacer la promoción de la candidatura en el mundo entero", explicó uno de los responsables.

París deberá centrar sus esfuerzos en el segundo exámen oral, en julio en Lausana, más que en la visita de la comisión de evaluación entre el 13 y el 17 de mayo.

En la ciudad suiza el centenar de miembros del COI llamados a votar en septiembre tendrá la ocasión de hacer preguntas.

Está claro que, según las conversaciones que se establecieron tras las presentaciones de las tres ciudades, las dos favoritas juegan en otra categoría que la capital húngara.

Pero Budapest sorprendió por su franqueza y sus ganas. "La alternativa a las megápolis y una esperanza para las ciudades de media importancia que desean recibir los Juegos", señaló.

Es seguro que el equipo húngaro se ha tomado al pie de la letra la Agenda 2020 del COI: un paquete de medidas destinadas a hacer los Juegos más accesibles, menos caros y más humanos.

Con pocos medios económicos y un equipo desconocido, Budapest intentará en 2017 explotar su baza de capital simpática. Necesita un dosier convincente sobre sus compromisos con respecto a la viabilidad y al presupuesto.

El informe de la comisión de evaluación ofrecerá a finales de junio importantes elementos a los votantes del COI.

Después llegará el momento de la emoción y de la subjetividad, que tienen un papel muy fundamental y que harán esta elección, como las anteriores, imprevisible.

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