Los regresos han tenido lugar algo más de un mes después de que una delegación gubernamental viajara a Ghana para reunirse con estas personalidades, entre las que figura Kadet Bertin, quien fuera ministro de Defensa durante el Gobierno de Gbagbo.
El propio Bertin ha apuntado que la delegación ha sido la principal responsable de lo ocurrido, recalcando que "fue la primera vez que el Gobierno marfileño envió una delegación oficial a reunirse con los exiliados".
"Nuestro país está en una fase de mutación extremadamente profunda que implica que la acción política llame constantemente a la tolerancia, la paz y el perdón", ha dicho, en declaraciones a la citada emisora.
Por su parte, el Ministerio de Cohesión Social ha asegurado a los marfileños en el exilio que se garantizará su seguridad y que no serán detenidos a su regreso al país.
Gbagbo tendrá que responder ante el Tribunal Penal Internacional (TPI) por la breve guerra civil que desató su negativa a entregar el poder en los comicios de 2010, que se saldó con 3.000 muertos y miles de desplazados internos.
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