Pedro Sánchez gana las primarias a Díaz y acerca el fantasma de nuevas elecciones

  • David ha ganado a Goliat. El todopoderoso aparato del PSOE no ha conseguido frenar a Pedro Sánchez, que volverá a dirigir el partido tras unas primarias que convulsionan la política española.

    El socialismo se prepara para una catarsis. Una de las primeras decisiones de Sánchez será elegir al nuevo portavoz en el Congreso. Susana Sumelzo, Adriana Lastra y Ábalos suenan como candidatos.

Pedro Sánchez gana las primarias a Díaz y acerca el fantasma de nuevas elecciones
Pedro Sánchez gana las primarias a Díaz y acerca el fantasma de nuevas elecciones

David ha derrotado a Goliat. Pedro Sánchez, con apenas un equipo de tres decenas de colaboradores, ha conseguido ganar las primarias del PSOE que van a convulsionar la política española en los próximos meses. Con un discurso que ha girado en torno al "no es no" a la derecha, Sánchez retornará a la Secretaría General del partido siete meses después del convulso Comité Federal que acabó con la primera etapa de su mandato. Ahora llega a Ferraz de nuevo con un equipo renovado, con algunas caras nuevas y con la amplia mayoría de barones territoriales en contra. 

La victoria de Sánchez es histórica. Nunca antes un candidato que no había contado con el apoyo mayoritario del aparato del PSOE había alcanzado el mando en Ferraz. En estas primarias remaba con casi todo en contra. Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero, Alfredo Pérez Rubalcaba, los territorios más poderosos, la mayoría de los diputados... que apoyaban a Susana Díaz. Pero Sánchez sabía que el voto de estos 'popes' socialistas valía lo mismo que el del último militantes. Por eso cogió su Peugeot, montó una web para conseguir financiación y se echó a la carretera en búsqueda de un sueño. Dicen los sanchistas que lo que han visto estos meses en sus viajes por España es histórico: "Los militantes se nos echaban a llorar y nos decían que no les abandonáramos".

Pedro Sánchez ha sustentado su victoria en dos pilares: por un lado, la defensa a ultranza del "no es no" a la derecha y, de forma paralela, en la acusación a su rival de que fueron ellos quienes tras un 'golpe de Estado' el 1 de octubre permitieron al PP continuar en el Gobierno. La mecha estaba encendida y solo había que echar gasolina hasta este 21 de mayo. En el sanchismo están exultantes con el relato que han construido y defendido y que le ha llevado a conseguir más votos que avales. Claves de los resultados

En cuanto al escrutinio de las primarias, son varias las claves que arrojan los resultados: hay que fijarse, en primer lugar, en el resultado en Andalucía, la federación dominada por el susanismo y a la que pertenecen uno de cada cuatro afiliados del PSOE. Díaz ha ganado con holgura, con más de 25.000 votos, pero Sánchez ha conseguido más papeletas que avales, 12.500 frente a 8.818. Valencia ha sido otro territorio donde el nuevo Secretario General ha sustentado su victoria arrasando y consiguiendo 9.500 votos frente a los 4.200 de Díaz. En Cataluña también ha barrido Sánchez por 8.300 frente a 1.100. Y en Madrid ha estado cerca de alcanzar el 50% de los votos, con 6.200. 

Pedro Sánchez ha obtenido la victoria en todas las federaciones gobernadas por el PSOE, excepto en Andalucía. Es una victoria frente a los barones que le dieron la espalda. Guillermo Fernández Vara, Javier Fernández, Emiliano García Page, Javier Lambán y, especialmente, Ximo Puig no han conseguido frenar los votos hacia su rival en estas primarias. 

El nuevo Secretario General del PSOE ha conseguido superar con creces la cifra de avales que recogió. Presentó 57.369 firmas y ha logrado más de 74.000 votos, más de la mitad. A Susana Díaz, en cambio, le ha ocurrido lo contrario: logró 62.617 avales y ha obtenido 59.000 papeletas, mientras que Patxi López consiguió casi un 30% más de votos que de avales. ¿Qué pudo ocurrir? En el equipo del recién elegido líder socialista lo tienen claro: avalistas de Susana Díaz dieron la espalda a la andaluza y apostaron por Sánchez cuando había que depositar su voto en la urna de manera anónima. No ha habido trasvase de votos de López hacia Sánchez, lo que avala la teoría de que él fue el claro ganador del debate entre los tres candidatos.Varias incógnitas a partir de ahora

Una de las primeras decisiones que tendrá que tomar Pedro Sánchez será la elección del nuevo portavoz del Grupo Socialista en el Congreso. Con su antiguo amigo Antonio Hernando dimitido son varios lo nombres que maneja el equipo sanchista para ocupar este cargo. Los nombres de la aragonesa Susana Sumelzo, de la gallega Adriana Lastra y del valenciano José Luis Ábalos son citados por los colaboradores del Secretario General. .@sanchezcastejon: a quien teme Rajoy es a un PSOE unido. Y mañana tendremos un PSOE unido y camino a la Moncloa pic.twitter.com/EK8v7xYsuj— PSOE (@PSOE) May 21, 2017

Otro nombramiento que deberá efectuar será el de Secretario de Organización, el número dos del partido. Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, su jefe de campaña, es un firme candidato a este puesto, según se comentaba en Ferraz durante la noche.

Sánchez no será diputado, aunque dicen los suyos que no es importante (comparan la situación con Pablo Iglesias y Albert Rivera, que tampoco estaban en el Congreso y consiguieron un gran resultado). Cogerá un grupo parlamentario roto en dos y con mayoría de diputados contrarios a él. Deberá coser y unir a los 84 parlamentarios presentes en la Cámara Baja.

La principal incógnita que surge a partir de ahora es saber qué rumbo tomará el PSOE durante la segunda era de Sánchez y si se acercará a Podemos. En el PP ya hay convocado para este lunes una reunión del Comité de Dirección donde Rajoy abordará con su equipo la victoria de Sánchez (en Génova no olvidan que el socialista no quiso ni tomar café con el Presidente del Gobierno cuando le invitó a La Moncloa tras el 20D). El sanchismo cree que hay mayoría de izquierdas suficiente para echar al PP del Gobierno, a pesar de que Rajoy haya tejido durante estos meses una red de apoyos con Ciudadanos, PNV y CC, además de con el PDeCAT en el caso de la estiba.

La victoria de Sánchez provoca inestabilidad en la política española. El fantasma de unas nuevas elecciones está más cerca hoy. Rajoy tiene en su mano pulsar el botón rojo si no puede gobernar, y eso con el nuevo Secretario General del PSOE lo va a tener un poco más difícil. Por cierto, el Presidente del Gobierno no puede disolver las Cortes hasta que se debata y se vote la moción de censura que ha presentado Podemos.

La relación de Sánchez con Susana Díaz no se antoja fácil a partir de ahora. Las caras de la andaluza durante la noche eran largas, de derrota. Su equipo tampoco demostró demasiada caballerosidad con los ganadores. 

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