El gerente de Tabacalera del Este y 'mano derecha' de Horacio Cartes se querellará contra el líder del PLRA

  • José Ortíz, el gerente de Tabacalera del Este y 'mano derecha' del presidente de Paraguay, Horacio Cartes, ha anunciado este jueves que presentará una querella contra el presidente del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), Efraín Alegre, quien previamente le había acusado de ser quien ordenó el asalto a la sede de su formación la semana pasada que acabó con centenares de heridos y detenidos.
EUROPA PRESS
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"Pongo en conocimiento de toda la ciudadanía que he dado instrucciones inmediatas a mis abogados para iniciar la acciones legales correspondientes a fin de que el señor Efraín Alegre responda ante la Justicia", ha señalado Ortiz, en un comunicado recogido por la prensa paraguaya.

El gerente de Tabacalera del Este ha indicado que las afirmaciones de Alegre pueden ser calificadas como delito de difamación, calumnias e injurias. En el texto, Ortiz ha advertido de que la situación política que vive el país desde la semana pasada no lo habilitan a "mentir e inventar situaciones" con el propósito de ganar adeptos a su postura.

En rueda de prensa, Alegre aseguró tener pruebas que señalan a Ortiz como responsable de dar la orden de la actuación policial que acabó con la muerte del líder del ala juvenil de la formación, Rodrigo Quintana.

"La orden de atropellar el directorio (del partido) provino de él", ha señalado, según declaraciones recogidas por el diario paraguayo 'ABC'. "Es quien tenía y tiene el control del Ministerio del Interior y toma las decisiones operativas", ha agregado.

Asimismo, ha asegurado que no está sorprendido de que un gerente de Cartes "maneje" un Ministerio, ya que el Gobierno actual "es el de los gerentes de Cartes", ha criticado.

Durante el fin de semana, después de las protestas, el presidente destituyó al ministro del Interior, Tadeo Rojas, y al comandante de la Policía, Críspulo Sotelo --próximo a Ortiz--, tras la muerte del dirigente juvenil opositor.

La Policía de Paraguay negó en su momento toda responsabilidad en el asesinato de un Quintana, que tuvo lugar durante el asalto en Asunción, la capital del país, inmerso en una grave crisis política por una polémica votación que abre el camino a la reelección del presidente.

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