Todas las hipótesis siguen abiertas dos meses después de la desaparición de Diana Quer

  • 60 días sin Diana y la guardia civil baraja muchas hipótesis. Los investigadores siguen reconstruyendo la vida y los movimientos de la joven en busca de cualquier indicio sobre su paradero.

    La desaparición de Diana Quer se ha convertido en una de las más mediáticas con informaciones a diario en todos los medios hablando del caso o de la vida de la familia. 

Todas las hipótesis siguen abiertas dos meses después de la desaparición de Diana Quer
Todas las hipótesis siguen abiertas dos meses después de la desaparición de Diana Quer
Ana Domingo

Diana Quer desapareció hace ya dos meses. Aquel 22 de agosto la joven madrileña de 18 años, se divertía en las fiestas de la localidad coruñesa de A Pobra do Caramiñal, donde veraneaba desde que era pequeña. A las 2:40 se tiene noticias de ella por última vez. Volvía a su casa y le envió un whatsapp a un amigo de Madrid para decirle que alguien la increpaba.

Fue la última persona que tuvo noticias de ella. Desde ese momento todo lo que envuelve a la joven es un misterio y cada paso que da la Guardia Civil y sobre todo la familia de la joven, se convierte en noticia. 

La última información sobre este caso está relacionada con el perfil de facebook de la joven. Este viernes, unas amigas de Diana Quer daban la voz de alarma. El perfil de la red social estaba activo después de dos meses y lo sabían porque estaba enviando notificaciones sobre su actividad. La Guardia Civil no ha dado una explicación al respecto. Por eso, a falta de una confirmación oficial, se especula con distintas posibilidades: Podría ser que los movimientos estuviesen generados por las propias investigaciones que está llevando a cabo la Guardia Civil.Podría ser que la propia Diana tuviese activada la opción de Facebook de "recordar contraseña" y alguien hubiese entrado desde su ordenador.Podría tratarse de una tercera persona que dispone de las claves de la cuenta y está accediendo al perfil de la joven.Principales hipótesis

Ahora, dos meses después, la Guardia Civil tiene pocas cosas claras. Ni siquiera pueden descartar que se marchara voluntariamente, aunque es la hipótesis que tiene menos peso. 60 días son demasiados para una adolescente que, además, se fue con lo puesto. La mayoría de jóvenes que huyen de sus casas vuelven a la semana o los diez días, cuando se quedan sin dinero y no saben dónde ir.

Por eso parece más probable que alguien la retuviera contra su voluntad. Avalan esta hipótesis muchos datos, aunque algunos se han demostrado falsos a lo largo de la investigación. Hasta el momento sólo está confirmado que se la vio por última vez en A Pobra.

El resto de localizaciones se han obtenido por el rastreo de la señal de su móvil. Atendiendo a la posibilidad de que alguien se la llevara, la guardia civil ha trazado el perfil del posible responsable de la desaparición de Diana Quer.

Sería un hombre de entre 30 y 40 años, con antecedentes por agresión sexual o violencia de género y también relacionado con delitos contra la salud pública por tráfico o consumo de estupefacientes, según ha publicado La Voz de Galicia. Además viviría en la comarca del Barbanza, una zona geográfica en la que se encuentran A Pobra, Rianxo y Taragoña, localidades todas en las que se tiene constancia de una o de otra manera de la presencia de la joven. Aspectos confirmados

Pocas cosas hay claras en esta investigación, que en lugar de esclarecerse a medida que pasa el tiempo se enmaraña aún más. Pero, aún así, hay datos que sí están claros. La joven no pasó por casa la noche de su desaparición. Mucho se ha hablado y escrito sobre los pantalones rosas de la joven. Diana Quer los llevaba, según su madre, cuando salió de casa aquella noche.

Sin embargo se encontraban en casa cuando la guardia civil hizo el registro, un hecho que llevó a pensar que quizá volvió a casa. La madre de Diana Quer lo negaba, convencida de que la habría oído entrar. Finalmente reconoció que podría estar equivocada y a los pocos días fue la Guardia Civil quien confirmó la primera afirmación de la madre. Diana no tuvo tiempo de pasar por casa, según le registro de su teléfono.

Lo más probable es que esa noche vistiera otros pantalones. Y sabían que no había pasado porque activaron su teléfono para reconstruir las últimas conversaciones, mensajes y localizaciones de la joven madrileña de 18 años. Gracias a las antenas a las que se conectó el móvil de la joven aquella noche pudieron saber que el último lugar en el que estuvo, al menos su teléfono, fue en Taragoña, una pequeña localidad a 20 kilómetros de A Pobra, localidad en la que desapareció. 14 minutos antes, el teléfono estaba en A Pobra, imposible recorrer esa distancia en coche si pasó por casa.

Es este dato precisamente el que ha llevado a los investigadores a pensar que se subió en un coche, la distancia que recorrió y el hecho de no haber encontrado ningún indicio de la joven ni rastro de ningún tipo en las batidas que se han realizado en los alrededores de A Pobra.  Por eso analizan las grabaciones de las cámaras de seguridad que podrían haber registrado algo, así como las de tráfico colocadas en la autovía, única vía de acceso a la zona.

Líneas de investigación descartadas

Los investigadores dan poca credibilidad a la declaración prestada hace unos días por unos jóvenes que se encontraban en Taragoña (lugar donde el teléfono de Diana Quer emitió por última vez) y que afirmaron verla montar en el coche con un "hombre con malas pintas." La Guardia Civil cree que teniendo en cuenta la distancia y la poca luz a la que se encontraban los testigos del lugar donde estaba aparcado el supuesto coche es imposible afirmar que se trate de la joven Diana Quer. 

Se descarta también que los feriantes tuvieran algo que ver con la desaparición. En un primer momento todos los ojos fueron hacia ellos después del último mensaje que envió Diana Quer a su amigo esa noche. La Guardia Civil los interrogó a todos y reconstruyó el camino que recorrió la joven aquella noche y descartó esta línea de investigación.

Tampoco creen que saliera de Galicia en barco, como se barajó en un principio ya que no hubo actividad marítima en ninguno de los puertos deportivos cercanos la noche del 22 de agosto. 

La Guardia civil no da mucha credibilidad a la última afirmación de la madre. Diana López cree que hay indicios de que su hija se encuentra en Estados Unidos y por eso ha pedido a SOS desaparecidos que emita una alerta de búsqueda para cinco estados de ese país. Se trata de Tenesis, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Virginia y Florida. Desde la semana pasada el cartel con la foto de Diana y la palabra Desaparecida puede verse en aeropuertos, estaciones y redes sociales de esos lugares. Relaciones familiares

Y a medida que se van desvelando cada uno de los pasos de la investigación también salen a la luz las malas relaciones y los conflictos que enfrentaban a todos los miembros de la familia Quer- López Pinel.

El primer día que se conoció la desaparición de la joven Diana Quer, los padres aparecieron juntos para pedir ayuda en la localización de Diana. Pero la imagen de unidad duró poco y la tensión del momento hizo saltar por los aires la ya de por sí mala relación que mantenían ambos progenitores. Juan Carlos Quer un empresario de éxito con negocios en la construcción y en la compraventa de coches y Diana López-Pinel, ama de casa.

Así, durante estos 60 días hemos acudido a las acusaciones veladas y también directas de uno y otro. Divorcio conflictivo, cuantiosas pensiones, relaciones difíciles entre Diana y su padre y entre la hermana pequeña, Valeria, y su madre y también entre las dos hermanas. Trastornos alimenticios de las dos chicas, problemas psicológicos, acusaciones y denuncias al padre por parte de Diana y también de su exmujer que llegó a asegurar que Juan Carlos Quer le había maltratado... Todo ha salido a la luz pública.

Y un capítulo aparte tiene la lucha judicial por la custodia de Valeria Quer. La joven tiene ahora 16 años y tras el divorcio de sus padres se quedó con su madre. La tensión por la desaparición de la joven Diana llenó de discusiones el hogar familiar y tras sufrir un ataque de ansiedad, un juzgado de Riberia, (A Coruña) le concedió la custodia de Valeria al padre. La decisión la ratificó un juzgado de Pozuelo, localidad donde viven, pero esta semana la madre de la joven anunciaba feliz en las redes sociales que su hija Valeria había vuelto con ella.

 

El padre confirmó la noticia, asegurando que había sido el deseo de su hija, pero que él seguía teniendo la custodia. Al día siguiente ambos se vieron en el juzgado para tratar sobre este tema sobre el que parece todavía no está todo dicho.

Han pasado dos meses de la desaparición de Diana Quer y el caso se vuelve más complejo por momentos.  

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