La UE discute el lunes el refuerzo de la defensa europea tras la victoria de Trump y la situación en Turquía

EUROPA PRESS
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Los Veintiocho discutirán el lunes en Bruselas el refuerzo de la cooperación en defensa en Europa tras la victoria en Estados Unidos de Donald Trump, que ha cuestionado su compromiso con la seguridad de los países europeos de la OTAN que no paguen su cuota, y revisarán las relaciones con Turquía ante el deterioro del Estado de Derecho por la detención de miles de militares, jueces, periodistas y opositores tras el golpe de Estado fallido de julio.

Los ministros de Exteriores de la UE mantendrán en primer lugar una discusión sobre Turquía "que permitirá revisar el conjunto de la relación, también en sus aspectos sobre la adhesión" aunque no decidirán "nada" sobre la posibilidad de suspender o no las negociaciones de adhesión con Ankara, como ha pedido abiertamente Austria, aunque una gran mayoría de países se muestra partidario de "continuar, a pesar de todo, el diálogo con los turcos", entre ellos Francia, España y Reino Unido.

"Habrá una discusión relativamente viva", ha avanzado un diplomático europeo, que ha admitido no obstante que "hay muchos países que no se quieren enfadar con Turquía". "Hay países que querrían ir más allá, condenar al régimen de Erdogan. Lo que pasa es que todavía hay recorrido. Si consumes toda la pólvora diplomática ahora, la situación a corto plazo no va a mejorar mucho y pierdes capacidad de maniobra después", han resumido fuentes diplomáticas.

Eso sí, la UE ya ha dejado claro que, si Turquía reintroduce la pena de muerte, es incompatible con la adhesión al bloque. "Ellos mismos se excluirían si aprueban la pena de muerte. Ellos saben que eso es incompatible", han asegurado fuentes diplomáticas.

Los Veintiocho también discutirán cómo apoyar los esfuerzos de la ONU para relanzar las negociaciones entre el régimen y la oposición en Siria y Mogherini les informará de sus recientes contactos en Irán y Arabia Saudí para recabar su apoyo al inicio de una transición y preparar el apoyo a la reconstrucción y reconciliación, una vez se logre poner fin al conflicto. También hablarán del apoyo europeo a la reconstrucción en Irak, la crisis en Libia y harán balance del acuerdo nuclear con Irán.

DIFERENCIAS DE AMBICIÓN PARA RELANZAR LA DEFENSA EUROPEA

Los ministros de Exteriores y de Defensa mantendrán una sesión conjunta por la tarde --en la que se estrenan tanto Alfonso Dastis como María Dolores de Cospedal ante sus colegas--, en la que los Veintiocho tratarán de acordar unas directrices para avanzar en el refuerzo de la defensa europea y la autonomía estratégica de la UE para poder actuar en su vecindario sur y este y en África ante crisis, algo que deberán decidir los líderes europeos en la cumbre de diciembre.

Mogherini ya ha avisado que esto es todavía más urgente tras la victoria de Trump. "Una relación saludable con Estados Unidos necesita una Europea fuerte en defensa", avisó este jueves la jefa de la diplomacia europea, que presentará a los Veintiocho el lunes un plan con propuestas para avanzar en la cooperación en defensa y el desarrollo de capacidades, mejorar la capacidad de planificación y ejecución de las operaciones europeas y flexibilizar la utilización de los grupos de combate tácticos de la UE que nunca han sido utilizados por falta de voluntad política y problemas de financiación.

España, Francia, Alemania e Italia son los países que más empujan para avanzar en la cooperación en defensa y elevar el nivel de ambición aunque han dejado claro que no se trata de crear un Ejército europeo y, hasta ahora, Reino Unido ha venido bloqueando todo avance para no duplicar con la OTAN y rechaza de plano ideas como crear un cuartel general militar "permanente" en la UE.

Los países neutrales, como Austria, Irlanda y Suecia "no se quieren comprometer" en el desarrollo de la defensa europea "porque va en contra de su tradición" y, por su parte, "los países atlanticistas prefieren claramente el paraguas de seguridad de la OTAN", entre ellos Polonia, los bálticos y la mayor parte de los países Visegrado, pero también Países Bajos y Dinamarca y "otros, entre ellos Bélgica" que "no quieren pagar", han explicado fuentes diplomáticas.

"Es una discusión muy complicada. Partimos de posiciones totalmente diferentes. Tenemos un cierto número de diferencias muy fuertes", ha reconocido un diplomático europeo, que ha admitido que el nivel de ambición es "por ahora todavía bastante modesto" y "no todos los países han interiorizado el conjunto de las consecuencias de (la victoria de) Donald Trump".

LA FINANCIACIÓN, EL PRINCIPAL ESCOLLO PARA AVANZAR EN DEFENSA

El problema de la financiación es el principal problema para avanzar, ha admitido una fuente diplomática europea, que ha reconocido que países como Francia y España buscan ampliar los costes comunes del despliegue de los grupos de combate tácticos, que en la actualidad apenas cubren el 10% o 15% para poder incluir, entre otros, el transporte estratégico y tampoco hay acuerdo sobre cómo financiar el equipamiento de las fuerzas de países frágiles a los que entren la UE. "Nadie está dispuesto a poner más dinero", admiten las fuentes.

Con el objetivo de alentar la cooperación entre los países en el desarrollo de las capacidades militares, la Comisión Europea presentará el 30 de noviembre un plan de acción con medidas para apoyar a la industria del sector y contemplará la posibilidad de crear un fondo para financiar programas de capacidades de defensa conjuntos, vías para apoyar la financiación de las pymes, especialmente a través del Banco Europeo de Inversiones y prevé destinar 90 millones de presupuesto comunitario para la investigación en defensa entre 2017 y 2019, algo "tabú" hasta ahora.

Se espera que esto allane el camino para lanzar un programa dedicado de ayudas a la investigación en defensa a partir del 2021 con "unos 500 millones" de euros anuales, según fuentes diplomáticas, que admiten que Suecia es uno de los países más reacios a destinar financiación comunitaria para el sector de la defensa.

La Comisión ya ha dicho que está dispuesta a proponer "incentivos adicionales o dar instrumentos financieros adicionales" pero también se requiere "un esfuerzo financiero adicional" de los Estados miembro.

Mogherini ya ha dejado claro que no trata de crear un Ejército europeo sino aprovechar los instrumentos ya previstos en el Tratado de Lisboa pero nunca utilizados hasta ahora, como la cooperación estructurada permanente que permitiría a un grupo de países --por mayoría cualificada-- lanzar una operación por su cuenta o desarrollar capacidades de defensa concretas. Se espera que los Veintiocho acuerden el lunes "explorar" esta posibilidad, tal y como les plantea Mogherini en su plan, aunque algunos países como España querrían "ir más lejos".

Respecto al cuartel permanente, Mogherini también ha dejado claro que no proponen crear un cuartel general militar como el que tiene la OTAN (SHAPE) sino "racionalizar" las estructuras "ya existentes", aunque los países más partidarios de avanzar en la defensa europea insisten en contar "a medio plazo" con una estructura "permanente" para planificar y conducir las operaciones. El paso intermedio pasa por "reforzar" las estructuras existentes en Bruselas y "reconvertir" el Estado Mayor de la Defensa de la UE.

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