ZAPATERO DESTACA QUE RECONOCER A LOS SERVIDORES PÚBLICOS “NOS HACE MÁS FUERTES” COMO SOCIEDAD, EN EL HOMENAJE DEL CONGRESO A ALONSO

El Congreso homenajeó este lunes al que fue ministro de Interior y Defensa y portavoz parlamentario, José Antonio Alonso, fallecido el pasado 2 de febrero, aglutinando a personalidades de todo el espectro político y de la judicatura.
En un acto organizado por el Grupo Parlamentario Socialista, el expresidente del Gobierno y compañero “de pupitre” de Alonso, José Luis Rodríguez Zapatero, destacó que un país que “reconoce a los servidores públicos nos hace más fuertes como sociedad”.
Y subrayó que “hay muy pocas personas” que hayan “podido dejar la misma huella de afecto” en su barrio “de trabajadores” y en la “máxima institución de país”. “La unanimidad en España es casi imposible, y José Antonio la ha concitado en el recuerdo, en aquellos años que vivió con tanta gente, siempre con tanta dignidad”, ensalzó el expresidente.
Rodríguez Zapatero, en un acto en el que también estaba su mujer Sonsóles Espinosa, reconoció que la pérdida de Alonso ha sido “uno de los desgarros más difíciles que la vida me ha dado” y que la “huella del sentimiento, del vacío y del silencio” es una “laguna fuerte para mí”.
Pero el expresidente se dirigió al hijo de ‘Toño’, Javier, allí presente, en primera fila, para recordarle que era la “pasión más encendida” de Alonso y pedirle que siempre tenga “orgullo” por él porque “defendió una vida digna, con humildad, con esfuerzo, con trabajo, valoró el mérito y siempre optó por la generosidad”. “Quienes le conocieron y no compartían sus ideas, le apreciaban; los que le tenían amistad, además le admirábamos”, destacó.
El actual portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, se encargó de conducir el acto con constantes referencias a palabras dichas por el propio exministro y destacó que buscaba “el acuerdo por encima de las diferencias”.
Acto seguido, la presidenta del Congreso, Ana Pastor, subrayó que en este homenaje se dan cita de “forma unánime tantas personas” de distintos ámbitos políticos y judiciales.
Pastor, abrió el turno de personas de la mesa que recordaron la figura de Alonso. Le dedicó palabras de afecto, “sin hacer excesos” porque era “castellano viejo, no le gustaba ni el engolamiento ni la hipocresía”. Y lo recordó como “a ese político que camina por los pasillos siendo ministro, portavoz, y que nunca levitó, levitar es no entornar de los que pasan alrededor suyo”.
Su esposa, la jueza Celima Gallego, dedicó sus palabras al hijo común de 14 años, y expresó que “el sol se fue pero continúa saliendo todos los días, encaramado en una estrella, mirando de esa forma metálica” que él ponía cuando “escuchaba y comprendía a la gente”. Recordó que mañana cumpliría 57 años.
Durante el homenaje, se proyectó un vídeo en el que hablaron muchos socialistas como Alfredo Pérez Rubalcaba, Ramón Jáuregui, José Blanco o Leire Pajín, y los que fueron sus subordinados en Interior y Defensa, como Antonio Camacho y Soledad López; y diputados actuales como Juan Carlos Campo, Ángeles Álvarez o Soraya Rodríguez.
Antes de entrar en el homenaje, el que fuera portavoz parlamentario del PP, Alfonso Alonso, destacó su “categoría como una persona extraordinaria” y “una persona sin ningún prejuicio, era un enamorado de su país” con el que “era fácil hacer amistad”.
A su juicio, este es un “homenaje muy merecido y un reconocimiento a una persona que tuvo sentido de Estado” y que “siempre abría un diálogo y buscaba una cercanía con quienes no pensaban como él”.
El que fuera portavoz parlamentario del PNV en Madrid, Josu Erkoreka, destacó su “extraordinaria calidad humana y su capacidad para el compromiso, en un momento en el que la transacción para la política parece imposible y todo el mundo invoca la pureza”.
Por su parte, el que fuera compañero de partido y de Gobierno, Jesús Caldera, destacó que fue un juez demócrata “excelente” y “entregado al servicio público”. “Es una pérdida irreparable de una persona de bien”.
En la sala Ernest Lluch, donde había unas 200 personas, entre ellos siete exministros de la etapa de Zapatero: Jordi Sevilla, Carme Chacón, Elena Salgado, Magdalena Álvarez, Jesús Caldera, Jesús Montilla y Francisco Caamaño. Así como la exvicepresidenta primera del Gobierno María Teresa Fernández de la Vega, quién remarcó que fue un juez, un político, un parlamentario docto, lúcido y recto, a la vez que bueno y entrañable.
Eduardo Madina, que fue el secretario general del PSOE en el Congreso, recordó el “mano a mano” de sus años de trabajo que concluyó con una “nitidez total de amistad" entre ambos, así como varias anécdotas que mantuvo con un “tipo de una pieza”.
El cantante y compositor leonés Amancio Prada amenizó en varios momentos el acto recordando la afición por la guitarra del magistrado y exministro de Defensa e Interior.

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