Buenos Aires, 13 jul.- Las Abuelas de Plaza de Mayo dijeron hoy que conservan sus expectativas positivas respecto del resultado final del cotejo de las muestras genéticas de los hijos adoptivos de la directora de Clarín, el más poderoso grupo multimedia de Argentina, con las de todos los familiares de desaparecidos durante la dictadura.
La organización humanitaria, que lucha por encontrar a los hijos de los desaparecidos durante el régimen de facto, destacó en un comunicado que el cotejo de los perfiles genéticos de Marcela y Felipe Noble Herrera en el Banco Nacional de Datos Genéticos se está "desarrollando con normalidad".
El pasado lunes, el cotejo del ADN de los hijos adoptivos de la directora de Clarín, Ernestina Herrera de Noble, con el de las familias Lanoscou-Miranda y Gualdero-García, que iniciaron una causa para determinar si Marcela y Felipe son hijos de desaparecidos, dio negativo.
"Más allá de los resultados parciales, que son de público conocimiento, mantenemos, como en todos los casos, nuestras esperanzas de que el cotejo, finalmente, nos dé noticias positivas llegando a la verdad", dijeron hoy las Abuelas de Plaza de Mayo.
El cotejo prosigue con las muestras de ADN de otros familiares de desaparecidos conservadas en el Banco Nacional de Datos Genéticos de Argentina.
Marcela y Felipe Noble Herrera se presentaron el pasado 24 de junio en el hospital Durand de Buenos Aires, para someterse voluntariamente a la extracción de sangre, luego de negarse a ello por años.
El año pasado, la jueza del caso, Sandra Arroyo Salgado, ordenó la extracción obligatoria de muestras genéticas.
Por orden de la magistrada, los domicilios de los hermanos fueron allanados en mayo de 2010 para tomar prendas, cepillos de dientes y cabellos, pero el banco de datos determinó que las muestras no eran válidas para su análisis por presentar varios perfiles genéticos.
Los hermanos Noble, que aseguran que su adopción fue legal, denunciaron sentirse víctimas de una "persecución" y "presas" de los "ataques" del Gobierno de Cristina Fernández, enfrentado con el grupo periodístico Clarín.
En un giro inesperado, los hermanos anunciaron a mediados de junio pasado que se someterían a la extracción de sangre para "terminar con esta causa que les ha generado enormes padecimientos tanto a ellos como a su madre, que tuvo problemas de salud que se han recrudecido por esta cuestión", según dijo en su día el abogado de los Noble Herrera, Héctor Silva.
"Celebramos la decisión de estos jóvenes de emprender finalmente el camino de su liberación", señalaron hoy las Abuelas de Plaza de Mayo, que sostienen que hay sospechas de que ambos jóvenes, que no tienen lazos de sangre entre sí, pueden ser hijos de desaparecidos cuyos perfiles genéticos fueron aportados por familiares que buscan a niños apropiados ilegalmente durante la dictadura (1976-1983).
"A Marcela y Felipe les decimos que, sea cual fuere la conclusión, cuentan con el apoyo y la experiencia institucional para continuar este nuevo camino que les traerá libertad", añadieron.
Se calcula que unos 500 bebés fueron robados a sus padres durante la última dictadura militar en Argentina, que causó la desaparición de unas 30.000 personas, aunque más de un centenar de estos niños logró recuperar su identidad gracias a la gestión de Abuelas de Plaza de Mayo.
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