Phnom Penh, 24 oct.- El primer ministro de Camboya, Hun Sen, y otros diez funcionarios han sido acusados hoy de interferir en el tribunal internacional que auspiciado por la ONU juzga en Phnom Penh a los antiguos jefes del Jemer Rojo.
La denuncia de obstrucción a la justicia ha partido del equipo legal de Nuon Chea, el ideólogo y "hermano número dos" del Jemer Rojo, quien está siendo juzgado en esa institución por genocidio y crímenes contra la humanidad, indicaron fuentes judiciales.
La subsecretaria general de Asuntos Legales de la ONU, Patricia O'Brien, hizo la semana pasada, durante una visita a Phnom Penh, un llamamiento al Gobierno de Camboya para que se abstenga de injerir en el tribunal internacional y de hacer más declaraciones en contra de la apertura de nuevos casos.
El 9 de octubre, el alemán Sigfried Blunk renunció a su cargo como juez de instrucción tras denunciar los intentos del Gobierno por obstruir la apertura de nuevas causas contra otros cinco jemeres rojos.
El primer ministro camboyano, ex jemer rojo al igual que otros miembros de su Ejecutivo, ha dicho reiteradamente que se juzgarán sólo los cinco casos aprobados al principio.
Estos casos son los de Nuon Chea, el jefe de Estado del régimen del Jemer Rojo, Khieu Samphan; el ministro de Exteriores, Ieng Sary; y su esposa y ministra de Asuntos Sociales, Ieng Thirith, todos ellos entre 79 y 85 años de edad.
Cierra el cupo Kaing Guek Eav, alias Duch, condenado el año pasado a 35 años de cárcel por su responsabilidad como director del centro de torturas S-21 en Phnom Penh.
El jefe del Jemer Rojo, Pol Pot, murió en la selva camboyana en 1998, prisionero de sus propios correligionarios.
Cerca de 2 millones de personas murieron bajo el régimen del Jemer Rojo, que controló Camboya entre 1975 y 1979.
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