Alerta fin de semana: salir de cañas sin pasarte con la báscula es posible

  • Llegó el fin de semana y, con el buen tiempo, las cañas y tapas en terrazas es el plan preferido de muchos, el cual tiene más calorías de la cuenta.
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Salir de tapas sin pasarse en la báscula es posible / Pixabay

España es el país de los bares. Tenemos un total de 101.397 locales, según la Federación Federación Española de Hostelería y Restauración (FEHRDATA), lo que supone que por cada 1.000 personas hay cerca de tres bares. Porque los bares son la segunda casa de muchos y el escenario perfecto para reunirse con los seres queridos, celebrar algo, contarle confidencias a una amigo o simplemente estar. A los españoles nos gusta estar en los bares, y cuando llega el fin de semana nos lanzamos a la calle en busca del que más se ajuste a nuestro gusto -por oferta, que no sea-.

La facturación del sector hostelero creció un 5% el pasado año, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), gracias al turismo y al mayor consumo interno. La recuperación ha potenciado que los españoles salgamos más y gastemos también más en hostelería y ocio, siendo el fin de semana el momento clave para ello. Y entre los planes favoritos para los días libres, ahora que parece que al fin llegó el buen tiempo, están las cañas, que se pueden extender durante una jornada entera acompañadas de numerosas tapas.

Una grata afición que puede suponer una bomba de relojería para los que quieren mantener la línea, pues estas bebidas y comidas se caracterizan por su alto contenido calórico. No obstante, también hay formas de salir de cañas sin tener que disparar la báscula, la clave está en mentalizarse y pensar antes de pedir.

El alcohol, cuanto más lejos mejor

Evidentemente, salir de cañas sin tomar cañas no es lo mismo. Pero, en la medida de lo posible, es mejor mantenerlas alejadas. Como nos indica la nutricionista Judith López, "el alcohol no tiene ningún efecto beneficioso en nuestro organismo, y aunque regularmente aparecen estudios que señalan la conveniencia de tomar ciertas cantidades para la salud, todos sabemos quiénes están detrás de esos informes". Por ello, la experta siempre recomienda a sus pacientes eliminarlo totalmente de su dieta.

Y para sustituirlo en la hora de las cañas, la recomendación es tomar bebidas naturales, como los zumos o batidos de frutas. "Aunque muchas de estas bebidas tienen bastantes calorías, si se toman naturales con frutos frescos es mucho mejor que tomar alcohol", comenta la nutricionista, quien también aconseja infusiones, tanto frías como calientes, e incluso café.

Pero, si no te puedes resistir a tomarte alguna bebida alcohólica durante el fin de semana, mejor vino que cerveza. "El vino se asimila mejor que la cerveza y, además, se bebe en menores cantidades que las cañas, ya que se sirve en vaso y tienen menos capacidad", recomienda López. Para los que no puedan resistirse a la cerveza, aconseja tomarla sin sin alcohol, al menos "para intentar rebajar la carga de propiedades perjudiciales que lleva, aunque las calorías van a ser igual que una con alcohol", advierte. 

Cuidado con las tapas

Como bien sabemos, las cañas vienen acompañadas de tapas, normalmente, aumentando así la posibilidad de que durante el fin de semana se vaya al traste el esfuerzo hecho de lunes a viernes por comer bien y cuidarse. Porque las tapas son una verdadera tentación...cargada de calorías. Pero si sabemos lo que tenemos que evitar, será más fácil no sucumbir -o al menos intentarlo-.

Como señala Judith López, en la medida de lo posible hay que evitar los fritos, es decir, empanadillas, croquetas, calamares... Los manjares que más se sirven como tapas. Por otra parte, los embutidos tampoco son recomendables, al igual que los preparados con salsas, o lo que es lo mismo, las famosas patatas bravas o al alioli. Lo más recomendable para la nutricionista son las tapas de verduras o las brochetas de frutas. Igualmente, si no se puede evitar tomar estos alimentos como tapas, "por lo menos hay que tener control con las cantidades", porque estos aperitivos engañan, ya que su reducido tamaño nos hace creer que no vamos a engordar por comerlos, cuando en reducidas cantidades contienen bastantes calorías.

Por lo tanto, disfrutar de las cañas del fin de semana no está reñido con cuidar la línea, pues todo consiste en actuar con cabeza y no dejarse llevar por las tentaciones. Aunque, en el país de los bares, resulta más complicado.

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