El Ayuntamiento de Madrid que lidera José Luis Martínez-Almeida quiere romper con todo lo que tenga que ver con la gestión de Manuela Carmena en la anterior legislatura. Además de su rechazo a cuestiones de calado como Madrid Central o el fin de proyectos impulsados por el equipo de gobierno de Ahora Madrid, el primer edil del PP también quiere diferenciarse con sus primeros Presupuestos municipales. Unas cuentas que corresponden al año 2020 y en las que Almeida hace una apuesta por ganarse el favor de algunos de los distritos con menor renta per cápita, como los de Villa de Vallecas, San Blas o Villaverde. Pero otras zonas en similares condiciones no tienen tanta suerte en este sentido, entre las que se encuentran Usera o Carabanchel.
El proyecto de Presupuestos aumenta el gasto con respecto al ejercicio 2019 en un 7,6%, alcanzando así los 4.686 millones de euros. Entre las medidas destacadas por el consistorio se reflejan una rebaja de impuestos de más de 81 millones, a través de bonificaciones en el IBI o por la reducción de la tasa de basuras. Algo posible, según las cuentas del consistorio, por el crecimiento del 2,3% del PIB de la ciudad y por el aumento de los ingresos, que suben un 3,4% hasta los 5.184 millones. Entre las inversiones más importantes está la destinada a estos distritos. Pero también la que se destina a las áreas de Obras y Equipamientos o de Economía, que podrán gastar un 16,82% y un 22,91% más respectivamente.
En el asunto de los barrios hay que diferenciar entre los crecimientos del presupuesto de un año a otro y la cantidad final destinada para cada uno en inversión. En la primera cuestión, entre las más beneficiadas por estas cuentas están Villa de Vallecas y Villaverde, que son dos de los que tienen menos renta por habitante, y que dispondrán de un 13,03% y un 12,04% más respectivamente. En esta lista también se encuentran las más acomodadas Barajas, Ciudad Lineal, Hortaleza, San Blas-Canillejas o Tetuán, con aumentos de entre el 11% y el 15,03%. Las zonas con más riquezas también dispondrán de más dinero, como ocurrirá en Chamartín (+17,64%) o Chamberí (16,28%).
En cuanto a las inversiones, las más cuantiosas serán en Vicálvaro y Villa de Vallecas, con proyecciones de 30,58 millones y 33,61 millones para cada una. Estas partidas contemplan proyectos de diversos tipos, como obras y construcciones que se impulsarán el próximo año y para las que se destina más dinero. No ocurrirá lo mismo en otras zonas como Carabanchel o Usera, a las que se riega con algo más de 6 millones por cabeza en el próximo ejercicio. Algo que, según fuentes municipales, se explica con que en ambos vecindarios ya hay proyectos en marcha que se presupuestaron en años anteriores. En total, los distritos tendrán 322 millones en 2020, unos 11 más que en las últimas cuentas de Carmena.
El resto de aumentos... y críticas de la oposición
Estos aumentos destinados a esos barrios con menos renta van en la línea de lo que pidió Ciudadanos durante la campaña, con promesas de algunos de sus ahora concejales para las zonas antes mencionadas. Almeida y su equipo han recogido el guante de las mismas, incluyendo en estos presupuestos ese aumento de las cantidades destinadas a los mismos. Unas cuentas en las que también hay más fondos para los parques de bomberos o la Policía Municipal. A lo que hay que sumar distintas subvenciones a través del departamento de Medio Ambiente, como las destinadas a los vehículos no contaminantes. También se han proyectado becas para las escuelas infantiles por 3,3 millones.
Todas estas previsiones no han convencido a Más Madrid, que acusa al gobierno de Almeida de ofrecer unas cuentas que no son reales. Especialmente por esa rebaja de impuestos combinada por el aumento del gasto, ya que "es imposible que esto se cumpla", ha señalado su portavoz, Rita Maestre. La concejala del partido de Íñigo Errejón también ha criticado el poco aumento de las partidas que, a su juicio, se prevé para las áreas sociales.
El otro asunto que se achaca a Almeida es el incumplimiento de la regla de gasto, que fue la principal batalla entre la anterior alcaldesa y el gobierno de Mariano Rajoy. Según Más Madrid, los que eran "defensores de la ortodoxia financiera" ahora se "comen sus palabras con patatas" debido a que no cumplirán con las exigencias en materia económica del Ejecutivo central. Algo que niegan desde el consistorio, ya que fuentes consultadas señalan que es "llamativo" viniendo de "quienes no cumplieron con ella en ningún momento". "Si incumplimos es en el año 2019 por su culpa", aseguran las mismas fuentes.
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