Alto Comisariado DDHH denuncia brutales asesinatos de periodistas en México

Ginebra, 30 sep.- El Alto Comisariado de la ONU para los Derechos Humanos denunció hoy el creciente número de brutales asesinatos de periodistas en México, lo que ilustra la inseguridad en el país y la vulnerabilidad de estos profesionales, además de constituir una seria amenaza a la libertad de expresión.

El portavoz del alto comisariado, Rupert Colville, indicó hoy en Ginebra que durante el mes de septiembre su oficina en México ha tenido constancia de los casos de al menos cuatro periodistas asesinados.

El más reciente es el caso de María Elizabeth Macías, periodista del periódico de Nuevo Laredo "Primera Hora", cuyo cuerpo mutilado y decapitado fue hallado el pasado 24 de septiembre junto con un mensaje escrito a mano en el que el cartel de la droga Zetas se atribuía el asesinato.

En la nota explicaban que los mensajes y artículos que Macías escribía en redes sociales, muy críticos con las actividades de estos grupos violentos y la impunidad con la que operan, fueron el motivo de su asesinato.

Once días antes un hombre y una mujer aparecieron asesinados junto a un mensaje que decía: "Esto es lo que les sucede a los usuarios de Internet".

"Está claro que estos asesinatos pretenden lanzar un mensaje de terror a los periodistas para silenciar posibles informaciones sobre las actividades criminales de los carteles de la droga mexicanos", precisó Colville.

Según el portavoz, esta situación dificulta todavía más la campaña impulsada por las autoridades para promover reportajes e informaciones anónimos y evitar así las represalias hacia periodistas.

Durante el mes de septiembre, además de los casos de periodistas, han continuado sucediéndose asesinatos de población civil y esta misma semana, el pasado martes, fueron encontradas cinco cabezas decapitadas metidas en bolsas con mensajes dentro en Acapulco.

Además, el 20 de septiembre, dos camiones con los cuerpos de 23 hombres y 12 mujeres que habían sido torturados y asesinados fueron abandonados en las calles de Veracruz.

La oficina del Alto Comisariado en México está investigando el caso ya que los periodistas que fueron a cubrir este suceso a la morgue de Veracruz están recibiendo amenazas de muerte.

Desde el Alto Comisariado se mostraron comprensivos con la complicada situación de las autoridades mexicanas, pero expresaron su preocupación por la impunidad que reina en el país a la vista de estos sucesos.

"Estamos especialmente preocupados por el hecho de que muchos de estos crímenes parece que se han cometido con la cooperación o aquiescencia de agentes de las fuerzas de seguridad", precisó Colville.

Por ello, el portavoz pidió a las autoridades mexicanas que inicien investigaciones imparciales sobre estos crímenes y les recordó su obligación de proteger a todos los mexicanos y asegurarles el disfrute de sus derechos fundamentales, en concreto, el derecho a la vida, la seguridad, la integridad de la persona y la libertad de expresión.