(ampliación) caso nóos. Rajoy invoca la "presunción de inocencia" para la infanta cristina


El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, invocó este jueves en dos ocasiones la "presunción de inocencia" de la infanta Cristina ante la decisión del juez que investiga el 'caso Nóos' de imputarla por los negocios que realizaba junto a su marido, Iñaki Urdangarin.
Rajoy hizo estas declaraciones durante una rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa junto al secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, quien dijo haber hablado telefónicamente con el rey Juan Carlos para desearle una pronta recuperación física tras la última operación.
Ante las preguntas de los periodistas, Rajoy afirmó que "no hay previsto hacer absolutamente nada" tras la imputación de la infanta Cristina en el 'caso Nóos', más allá de "respetar" las decisiones que adoptan los jueces, los fiscales y los tribunales.
"Respetamos siempre las decisiones que adopten los jueces, los fiscales, y luego, cuando se produzca el recurso ante la Audiencia, respetaremos siempre su decisión, igual que hemos hecho siempre con el principio de presunción de inocencia", dijo.
Rajoy volvió a invocar minutos después la "presunción de inocencia" para la infanta, quien tendrá que declarar ante el juez José Castro en Palma de Mallorca el próximo 27 de abril para dar explicaciones de su participación en el Instituto Nóos y en la empresa Aizóon.
El jefe del Ejecutivo aseguró que, a pesar de la imagen que existe alrededor de la Casa Real por el estado de salud del Rey y por la imputación de la infanta Cristina, "no hay previsto hacer absolutamente nada" para dar la vuelta a la tendencia social.
Rajoy negó que la Casa Real vaya a incluirse en la Ley de Transparencia que está tramitando el Congreso de los Diputados, que la infanta deba renunciar a sus derechos dinásticos o que sea necesario regular con una ley orgánica la posible abdicación del Rey, como establece la Constitución.
Asimismo, se desmarcó de su ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, quien por la mañana expresó la preocupación del Gobierno por el daño que la imputación de la infanta causa a la imagen de España en el exterior. "Esto no es un problema de estados de ánimo, es de respeto a las decisiones de los órganos judiciales", dijo.

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