(ampliación) cataluña. Mas, sobre la oferta de diálogo de rajoy:"ponga fecha y hora"

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, respondió hoy a la oferta de diálogo del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, invitándole: "Ponga fecha y hora". No obstante, también reiteró su compromiso con el proceso soberanista, al que ayer sólo se le cerró un camino "entre bastantes otros".
Mas invitó a Rajoy a poner día y hora a una reunión entre ambos por dos veces, en las respuestas que brindó en la sesión de control al Gobierno catalán en la cámara autonómica a los portavoces del PSC y PP: Pere Navarro y Alicia Sánchez-Camacho, respectivamente, que preguntaron a Mas por el debate en el que el Congreso de los Diputados rechazó ayer ceder a la Generalitat la competencia para convocar referendos.
A la portavoz del PP le dijo además que "el teléfono también funciona en sentido contrario" y le invitó a que sea el propio PP el que, con su mayoría absoluta, tramite la reforma de la Constitución que ayer Rajoy sugirió a los independentistas catalanes que iniciaran para canalizar su propuesta.
Pese a aceptar la oferta de diálogo de Rajoy, algo a lo que, aseguró, las instituciones catalanas están dispuestas a diferencia de las españolas, Mas también se reafirmó, en respuesta al portavoz de ERC, Oriol Junqueras, en el compromiso con el proceso soberanista y la consulta del 9 de noviembre, porque ayer "se perdió sólo uno de los caminos que se habían trazado para hacer la consulta, uno entre bastantes otros".
Según expuso, con la petición al Congreso de los Diputados de la cesión de la competencia para convocar la consulta, se quería "que quede claro" en Madrid, "pero también en Bruselas y en todo el mundo", que la primera intención de los sobranistas era "dialogar, negociar y hablar" con el Estado.
"Se nos ha dado un portazo, legítimo, democrático y mayoritario", reconoció Mas, concluyendo que ésa es ya "una vía cerrada porque ellos no quieren, pero hay otras abiertas". En concreto, se refirió a la ley de consultas que prevé aprobar el Parlamento catalán y a los "marcos internacionales, a ver cuáles nos pueden amparar, porque la mayoría de los ciudadanos catalanes siguen queriendo hacer la consulta". Por tanto, le dijo a Sánchez-Camacho, lo de ayer "no fue un punto final, sino un punto y aparte".
RIVERA Y HERRERA
También interpeló a Mas por el debate del Congreso el portavoz de Ciutadans, Albert Rivera, quien le preguntó "dónde estaba ayer a las cuatro de la tarde", en lugar de defender en el Congreso el juego que él mismo ha puesto en marcha, y le criticó que había perdido "por incomparecencia".
El president le contestó que a esa hora "estaba trabajando, como de costumbre", y que Rivera "no se entera de nada" si cree que es él o el resto de líderes nacionalistas quienes han montado la iniciativa, pues ha sido la mayoría de los catalanes, sólo que "no pueden decir que el pueblo se ha vuelto loco". Así quedó demostrado, dijo, en las elecciones catalanas de 2012, a las que muchos partidos acudieron con una apuesta clara por el derecho a decidir.
Desde ICV, Joan Herrera, uno de los ponentes que ayer defendió la iniciativa en el Congreso, acusó de su derrota parlamentaria al "autoritarismo de la España bipartidista", si bien reivindicó también la existencia de una España dialogante encarnada en IU, que votó a favor.
Mas le felicitó por su papel, junto al de los otros dos, y distinguió ayer "dos lenguajes y dos universos diferentes": el de quienes "se atrincheran detrás de leyes inamovibles y sagradas" y el de quienes quieren "dar la voz al pueblo". Pese a todo, cree que el debate fue "útil para toda España", pues los ciudadanos que tengan "un poco de criterio objetivo" verían el contraste entre ambos bandos.