(ampliación) el congreso convalida las medidas para el control de la economía sumergida


El Pleno del Congreso de los Diputados ha dado luz verde este jueves al decreto ley de medidas para la regularización y control del empleo sumergido y fomento de la rehabilitación de viviendas.
En la votación, ERC-IU-ICV, UpyD y BNG votaron en contra, mientras que Partido Popular, PNV y CiU se abstuvieron, si bien mostraron sus dudas sobre el alcance de este plan. Así, 167 diputados mostraron su apoyo, 158 se abstuvieron y 8 votaron en contra.
Además, el texto se tramitará por la vía de urgencia y no como proyecto de ley, lo que retrasaría su aplicación por el trámite parlamentario.
El ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, insistió en que el real decreto del Gobierno, en ningún caso, es una amnistía fiscal para los empresarios, puesto que la Inspección de Trabajo "seguirá actuando y sancionando".
Gómez, durante el debate en el Congreso de los Diputados para convalidar este real decreto, afirmó que "no se trata de una amnistía" en favor de los empresarios defraudadores, porque se va a seguir sancionando a quienes ocupen a trabajadores de manera irregular.
Además, el titular de Trabajo e Inmigración aseguró que "no se prevé la condonación de deudas de los empresarios", que deberán abonar las cotizaciones sociales que adeuden.
En su defensa, Gómez pidió a los diputados su apoyo a la tramitación de este texto de manera urgente debido a que causa "evidentes efectos negativos" para el conjunto de la sociedad y produce una "distorsión" en el mercado de trabajo.
"Su puesta en marcha es urgente y es inaplazable y permitirá la contribución al equilibrio presupuestario y propiciar así el crecimiento económico".
NUEVA ENFERMEDAD: "DECRETISMO"
Ante ello, el diputado del Partido Popular José Ignacio Echániz arremetió contra esta medida argumentando que el ministro "sufre una enfermedad nueva que se llama decretismo".
Según dijo, su principal síntoma es la "obsesión por aprobar cada viernes en Consejo de Ministros un nuevo decreto aunque no sirva para nada".
Echániz continuó con el símil médico y afirmó que es una "enfermedad grave" que provoca un aumento "de los 'psoe', es decir Parados sin Opción a Empleo". Para concluir, dijo que esta enfermedad se cura irremediablemente "con la convocatoria de nuevas elecciones".
Desde CiU, Carles Campuzano, se mostró "excéptico" sobre la eficacia de estas medidas que tendrán unos resultados "inciertos". Por ello, pidió medidas "más audaces", aunque "no nos vamos a oponer a que este decreto salga adelante".
Mientras, Emilio Olabarría (PNV) tambien justificó su abstención en la votación a que "no percibimos contundencia" de estas medidas, cuando ya existen planes para intentar aflorar la economía sumergida que podrían tener mucho más recorrido.
En cuanto a los grupos minoritarios, Rosa Díez (UPyD) afirmó que la necesidad de esta medida es la "demostración de un fracaso" y "lo único que mejorarán serán los datos paro, porque esto es maquillar la realidad. Por tanto, pan para hoy y hambre para mañana".

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