Annan asegura que Irak e Irán apoyan el inicio de un diálogo en Siria

Bagdad, 10 jul.- El mediador de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, dijo hoy en Bagdad que tanto Irán como Irak comparten su opinión de que la prioridad en Siria es que las partes enfrentadas comiencen un diálogo.

En una breve rueda de prensa tras reunirse con el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, el emisario internacional destacó que Bagdad apoya su plan de paz, que tiene el objetivo de cesar las acciones de violencia en Siria y hallar una solución a la crisis.

Annan señaló que "todos, tanto Irán como Al Maliki" coinciden en que la violencia debe frenarse y que "la prioridad es que todas las partes se sienten a dialogar sobre el futuro político de Siria".

El mediador internacional dijo también que "la trágica situación en Siria que afecta a mujeres y niños debe terminar" y aseguró que "la continuación de la violencia llevará a endurecer las posturas y a tensar más la crisis".

Asimismo, adelantó que presentará próximamente un informe al Consejo de Seguridad de la ONU sobre el resultado de sus reuniones con el presidente sirio, Bachar el Asad, en Damasco, así como con los responsables iraníes e iraquíes.

En sus conversaciones en Teherán y Bagdad, Annan analizó hoy el impacto que el conflicto tiene y puede tener en el futuro en los países vecinos de Siria.

Bagdad propuso anteriormente una hoja de ruta en la que se solicitaría al Gobierno y a la oposición siria un alto el fuego inmediato como paso previo antes de entrar en negociaciones directas auspiciadas por la Liga Árabe y la ONU.

La propuesta iraquí alienta también a Damasco a instaurar las libertades públicas, la formación de partidos políticos, y fijar una fecha para la celebración de comicios generales limpios con la observación de la ONU.

En Teherán, Annan se entrevistó con el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Ali Akbar Salehi, quien le advirtió de que una decisión errónea sobre el conflicto en Siria puede causar "una catástrofe" en la región.

El conflicto sirio ha causado, según la ONU, más de 11.000 muertos, 100.000 refugiados en países terceros, y un millón y medio de personas necesitadas de asistencia humanitaria urgente.