Aragón será la 'prueba piloto' para la app de rastreo contra el coronavirus 

Aragón coronavirus fase 2 flexibilizada
Aragón será la 'prueba piloto' para la app de rastreo contra el coronavirus. 
EFE

 El Gobierno de Aragón iniciará la próxima semana una prueba piloto para poner en marcha “Radar COVID”, la aplicación móvil que ha lanzado el Ministerio de Sanidad para rastrear los contactos de los positivos de coronavirus.

El programa utiliza la señal “bluetooth” de los teléfonos móviles para avisar a los usuarios de si han estado a menos de dos metros de distancia de una persona contagiada durante los catorce días previos a su diagnostico.

La consejera de Sanidad del Gobierno aragonés, Sira Repollés, ha anunciado este jueves a los medios que la herramienta comenzará a funcionar en los próximos siete días, tras lograr integrar la comunicación de los datos en el sistema de salud de la comunidad.

“Desde el primer momento manifestamos nuestro interés”, ha explicado Repollés durante la visita al laboratorio de microbiología del Hospital Clínico de Zaragoza, donde se realizan buena parte de los test PCR de toda la comunidad, acompañada del presidente de Aragón, Javier Lambán.

La aplicación está disponible tanto en el sistema operativo de Android como en el de iOs, que utiliza la marca Apple, y no utiliza las herramientas de geolocalización, ni recoge ningún dato de los usuarios para preservar su privacidad.

Más allá de lanzamiento de la aplicación, la consejera de Sanidad también se ha pronunciado sobre la decisión de la Xunta de Galicia de prohibir fumar en la vía pública para frenar los contagios, una medida que “no se descarta” en Aragón.

“La estamos valorando como todas las medidas de otras comunidades autónomas”, ha aclarado.

Repollés ha asegurado que Aragón ha logrado situarse en una “tendencia claramente descendente” en el número de contagios de covid-19, aunque ha reconocido que la comunidad se encuentra en un momento “crítico” por el avance de los ingresos hospitalarios en los últimos diez días, pero ha insistido en que “no hay tensión en el sistema sanitario”. 

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