Los agentes de Asuntos Internos no han encontrado ni rastro de los papeles sensibles de los Pujol entre el material de José Manuel Villarejo. La Policía Judicial ha concluido que, tras el estudio exhaustivo de todos los documentos incautados al comisario jubilado tras su detención en noviembre de 2017, no hay indicio alguno que le vincule en el supuesto robo de 2013 que denunció el expresidente catalán en el marco de una operación que implicó la entrada en su casa de Pedralbes (Barcelona) y que él mismo atribuyó a la entonces cúpula del Ministerio del Interior.
En un oficio del pasado mes de diciembre al que ha tenido acceso La Información, la Policía Judicial de la macrocausa Tándem asegura que, "salvo omisión o error involuntario", no se ha localizado entre la documentación intervenida "información, indicio o prueba" relacionada con el allanamiento de morada que se produjo en febrero de 2013 de acuerdo con el escrito presentado a esta causa por la defensa de Pujol. El documento policial, que consta de 150 páginas, analiza, no obstante, todas las evidencias intervenidas al comisario que sí guardarían relación con pesquisas a líderes independentistas y que se engloban en el marco de la bautizada como 'operación Cataluña'.
Los agentes analizan una decena de audios que grabó el comisario recientemente excarcelado y cuyos protagonistas eran, principalmente el empresario Javier de la Rosa y la expareja del primogénito del clan, Victoria Álvarez. Ambos son identificados en el oficio policial como 'fuentes humanas' que manejaba Villarejo y que le habrían facilitado información de actividades supuestamente delictivas del clan así como del dinero que tenían oculto fuera de España. Este último asunto se ha investigado en un procedimiento penal seguido en la Audiencia Nacional contra toda la familia del expresidente catalán y que está pendiente de enjuiciarse.
Al respecto los agentes explican que Villarejo, que ha pedido en numerosas ocasiones declarar sobre la operación Cataluña, trató de captar en aquellos años información relacionada con casos de corrupción que afectara de manera directa al líder independentista, además de datos concretos de las cuentas que tenían abiertas en el extranjero. "Gracias a toda esta relación he podido saber la existencia de bastantes, como dices aquí, entramados societarios, de bancos, de despachos de abogados, de asesores en el extranjero", reza en una de las grabaciones la expareja de Pujol Ferrusola. En la conversación, que se produjo en el año 2012, también relata que se produjeron viajes a Londres, México y Andorra y que, aunque todos estaban "empeñados" con Suiza, era donde menos dinero tenían.
Al respecto, los agentes explican en su informe que algunos de estos audios ya habrían sido analizados y que "el hecho de que pudieran haber tenido lugar vigilancias o seguimientos sobre las actividades de Pujol Ferrusola sería consecuencia lógica de las obligaciones legalmente impuestas a la Policía Judicial". Además de las grabaciones, se analizaron muchas notas informativas que el dueño del Grupo Cenyt atesoraba en su casa en relación a sus pesquisas. En muchas de ellas se habla de la obtención de información que estaba recibiendo así como de "pagos de comisiones a CiU" o de supuestas mordidas para licitaciones de obra pública en la comunidad, hecho este último que se investiga también en la Audiencia Nacional en el marco de la causa del 3%.
El móvil de Martínez
Las notas del policía hacían referencia casi exclusivamente a la fortuna amasada en el extranjero así como al presunto blanqueo de capitales cometido con ese dinero opaco al fisco. Al respecto el oficio precisa que el contenido de estos manuscritos "parece guardar relación" con uno de los archivos de audio extraído del teléfono del exsecretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez. Los agentes se incautaron de este dispositivo hace ahora un año en el marco de un registro acordado en la pieza séptima de esta causa, relativa al espionaje ilegal a Luis Bárcenas. De este modo, constatan que esta conversación, de 2014, se produjo a tres bandas entre el exconsejero delegado de la Banca Privada de Andorra (BPA) Joan Pau Miquel, y un inspector jefe de la Policía.
La conversación giró en torno al ofrecimiento que se habría hecho desde el Ministerio del Interior que entonces dirigía Jorge Fernández Díaz, de evitar investigar al BPA si, a cambio, aportaba información confidencial sobre las cuentas del expresidente de la Generalitat de Cataluña. Con todo, cabe resaltar que en el marco de la investigación abierta por la trama 'Kitchen' también han trascendido pistas sobre esta investigación a los líderes independentistas. De hecho, figura un mensaje que el exjefe de la UCAO, Enrique García Castaño mandó al exnúmero dos de Interior cuando todavía tenían buena relación en el que aseguraba que había recibido órdenes para que, "de forma clandestina volviera a montar el tema catalán".
El análisis de los últimos audios de la red parapolicial impulsada para sustraer a Bárcenas documentos sobre el PP recoge también cómo Villarejo espió a personas ligadas a este asunto como Francisco Marco, director de Método 3 o el propio De la Rosa. El financiero, que siempre ha negado haber cobrado por su actuación como 'confidente', se habría ofrecido a colaborar en este asunto a cambio de 20 millones de euros. Villarejo le negó ese pago aunque dijo que podría recibir una horquilla de nueve o diez a lo que él asintió y le dijo, a modo de 'adelanto', que él mismo llevó maletas de la Generalitat por una puerta que había detrás del despacho de Pujol. Dijo que se las bajaba a su hijo y las metían en un coche. Es por ello que la defensa de la familia Pujol-Ferrusola se ha dirigido en muchas ocasiones a la Audiencia Nacional para que les permitan figurar como víctimas de los espionajes del comisario aunque el magistrado todavía no se ha pronunciado al respecto.
