Si hace unos días era la Carabela Portuguesa, el nuevo tipo de medusa que puebla la costa mediterránea, ahora el mosquito tigre vuelve a acaparar la atención. Porque las lluvias que cubrirán la Península Ibérica este fin de semana prometen dar más alas a esta especie, que aunque lleva años en España, ha sido en los últimos meses cuando ha resurgido con fuerza en zonas a las que no había llegado antes.
Precisamente, las fuertes lluvias de esta primavera han propiciado la reproducción de estos mosquitos en las acumulaciones de agua producidas, algo que se espera que vuelva a ocurrir este fin de semana, pues desde el viernes lluvias torrenciales han caído por buena parte de España. Además, el hecho de que las temperaturas sean altas favorece que las larvas se reproduzcan con más facilidad, lo que augura un aumento de su presencia en nuestro país.
Pero, ¿de qué tipo de mosquito hablamos y qué tipo de amenaza supone? El mosquito tigre llegó a España en 2004, cuando entró por el litoral catalán y se ha ido extendiendo por la cuenca del Ebro y el arco Mediterráneo. En apariencia es un mosquito normal, pero la diferencia está en sus picaduras, que son mucho más preocupantes que las de un mosquito normal. Porque no solo generan molestias; también pueden transmitir enfermedades tropicales como el Dengue o la Zika.
Y no solo eso. Aunque no se llegue a ese extremo, sus picaduras son bastante más numerosas, dolorosas y molestas que las del mosquito normal. Suelen picar más en las piernas y en personas con alergia a su veneno pueden producir choques anafilácticos. Para evitar sus picaduras, la doctora Pérez, Jefa de Alergología del Hospital Vithas Xanit Internacional, recomienda aplicar medidas idénticas a las que tomamos con los mosquitos comunes, como emplear repelentes, minimizar las zonas del cuerpo expuestas o evitar ir al campo o caminar cerca de ríos, zonas húmedas, pantanos y zonas ajardinadas todo durante las horas del amanecer y atardecer.
En cuanto a los repelentes, la doctora destaca la importancia de utilizar los que estén autorizados por el Ministerio de Sanidad y tener en cuenta que los basados en aceites esenciales tienen menos efecto que los que contienen DEET (N, N-Dietil-meta-toluamida), icaridina o derivados de PMD.
Su presencia, en aumento
En los últimos años, la presencia del mosquito tigre en España ha aumentado, pasando del litoral catalán a la cuenca mediterránea llegando hasta Andalucía. En concreto, según un informe de Vigilancia Entomológica correspondiente al año pasado, el mosquito tigre ya está presente en 70 municipios de los 122 muestreados. Se detectó su expansión en zonas de Aragón, Cataluña, Comunidad Valenciana, Baleares, Murcia y Andalucía. Además, llegó por primera vez al archipiélago canario.
Además, su presencia se intensifica en zonas muy relacionadas con actividades humanas. De hecho, el pasado año ya se detectó al mosquito tigre por primera vez en la ciudad de Sevilla, lo que supone que, cuanta más gente, más posibilidades hay de se expanda este insecto. Igualmente, también se muestran atraídos por las actividades industriales, como demostró su detección en centros logísticos y de transporte de mercancías de País Vasco.
Así, ante una presencia cada vez mayor e imparable, la vigilancia se ha extremado, como pone de manifiesto este informe, con puestos de detección en cada vez más municipios, pues, según los expertos, "lo peor está por llegar", ya que las lluvias continúan, anunciando un verano caliente en las costas con el mosquito tigre...y la Carabela Portuguesa.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios