Sevilla, 10 sep.- El auto de la juez Mercedes Alaya de pedir la imputación de los expresidentes de la Junta José Antonio Griñán y Manuel Chaves y de cinco exconsejeros ha eclipsado el acto de toma de posesión del nuevo Gobierno andaluz presidido por Susana Díaz, que comienza hoy su andadura.
Durante la celebración del acto y, mientras intervenía la presidenta, se formó un cierto revuelo entre el público asistente al conocerse el citado auto a través de los mensajes de móviles y las redes sociales, lo que provocó murmullos en el Salón de los Espejos del sevillano Palacio de San Telmo, sede de la Presidencia de la Junta de Andalucía.
El auto judicial causó una sorpresa generalizada entre el numeroso público asistente al acto y también entre los consejeros y, de hecho, el de Justicia e Interior, Emilio de Llera, se mostró incrédulo al preguntar a los periodistas si de verdad había sacado hoy el auto, si bien quiso dejar claro: "Hoy el protagonismo es del Gobierno, no de la juez".
En la misma línea se expresaron otros consejeros, como el de la Presidencia, Manuel Jiménez Barrios, que se limitó a decir: "Hoy tocaba (hablar) del Gobierno", y el vicepresidente, Diego Valderas (IU), que manifestó que "la Justicia a su trabajo y el Gobierno a gobernar", mientras que otros fueron más críticos como la de Agricultura, Pesca y Medio Rural, Elena Víboras, quien apuntó "demasiadas coincidencias" en las fechas de los autos.
También coincidieron en esta idea los secretarios generales de CCOO y UGT en Andalucía, Francisco Carbonero y Francisco Fernández, respectivamente, quienes resaltaron que en el caso de los ERE los autos "se vienen produciendo permanentemente siempre que hay un acto de importancia para Andalucía y para el Gobierno andaluz".
Los once consejeros del Gobierno (ocho del PSOE y tres de IU) han prometido sus cargos ante la Constitución y el Estatuto de Autonomía, en un acto en el que la presidenta de la Junta ha pedido "altura de miras" y "honestidad" para lograr un "clima de transparencia y ejemplaridad pública", y ha añadido: "Quiero un gobierno fuerte pero también sensible" con los ciudadanos.
Díaz, que ha pedido a los miembros de su gobierno que estén "siempre cerca de la gente", ha querido que este acto fuera "breve y sencillo" porque "no hay tiempo que perder y lo que esperan los ciudadanos son, sobre todo, hechos", ha enfatizado.
"Este es uno de los momentos más difíciles de la autonomía andaluza, sobre todo para la gente sencilla", ha remarcado Díaz, que se ha mostrado convencida, no obstante, de que se irán "superando" las dificultades, para lo que ha pedido el esfuerzo de todos.
En este sentido, ha dicho que espera el "apoyo crítico" de quienes hubieran preferido un gobierno "de otro color político" porque para Andalucía "toda la ayuda es poca".
Díaz, que ha tenido palabras de agradecimiento para los consejeros salientes, con los que ha dicho que ha vivido "un año intenso y bueno también para Andalucía", ha insistido hoy en que su voluntad es gobernar "para todos y todas", un mensaje que espera que sirva para los consejeros que le acompañan "en este camino".
Ha explicado que ha querido conformar un "auténtico equipo" del que espera "cohesión, altura de miras, honestidad y, sobre todo, trabajo, mucho trabajo" para propiciar la creación de empleo. EFE
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