Salvador Illa decide hoy

Ayuso se atrinchera y se niega a recibir las migajas de la fase 0,5: pide pasar a la 1

Isabel Díaz Ayuso.
Isabel Díaz Ayuso.

La Comunidad de Madrid se teme lo peor. Hace una semana, los planes del equipo de la presidenta Isabel Díaz Ayuso se desmoronaban como un castillo de naipes. El Ministerio de Sanidad rechazaba que la región pasase a la fase 1 de la desescalada, según su criterio, por no cumplir con los parámetros establecidos por la autoridad sanitaria española.

Hoy, en la Casa de Correos de la Puerta del Sol siguen recibiendo mensajes en los que, en resumidas cuentas, el filósofo Salvador Illa vuelve a mandar a boxes a la Comunidad de Madrid, aunque existe la posibilidad de que en última instancia le sean permitidas algunas actividades para aliviar la situación pero sin llegar a cambiar de nivel. Madrid quedaría así en un limbo que se ha venido a denominar fase 0,5 que no gusta nada a la presidenta madrileña.

Fuentes próximas al Gobierno regional aseguran a La Información que "nosotros pedimos el pase a la fase 1 (en ningún caso a la 0,5). La 0,5 sería una decisión por parte del Ministerio, discrecional y sin razones técnicas". "Nosotros pedimos la 1, en ningún momento hemos planteado la 0,5", sentencian con cierto enfado las citadas fuentes. "Además, nuestra situación no es la de Barcelona, que es con quien estaba negociando [el Ministerio] la 0,5".

Lo cierto es que Sanidad baraja que la Comunidad de Madrid continúe en la fase 0 de la desescalada del coronavirus pero que se puedan establecer algunas medidas de alivio, según fuentes conocedoras del planteamiento. Básicamente se trataría de permitir la actividad comercial sin tener que solicitar cita previa, pero con limitaciones de aforo. Fuera se quedarían la apertura de terrazas y las visitas a familiares, informa EP. Las presiones para que la región cambie de fase son grandes. Ayuso tiene al sector empresarial, motor económico de España, agitado y tremendamente preocupado por la falta de ingresos, los ERTE a los que se han acogido y el oscuro futuro que se presenta ante sus ojos.

Hoy Salvador Illa tiene sobre la mesa varias patatas calientes con las que podría quemarse. La 'patata catalana' de tolerar el pase a una Fase 0,5, a caballo entre la cero y la 1, podría llegar a encajar dentro de los planes de la Generalitat, que no han pedido el cambio de situación para Barcelona. En sí, los datos que se ofrecen a diario desde Sanidad sobre Cataluña generan dudas, dado que no dan la impresión de que la pandemia esté perfectamente controlada. De ahí que mantener 'encarcelada' a la Ciudad Condal parece una decisión sensata

La 'patata caliente' de Madrid es más compleja. La Comunidad Autónoma quiere acceder a la fase 1 y asegura cumplir todos los requisitos para lograrlo, pero desde el Ministerio de Sanidad está recibiendo calabazas. Los datos diarios de la región madrileña también desconciertan: los muertos de las últimas 24 horas ascienden a 30, cuando un día antes la cifra era de solo 19. Cierto es que el número de fallecidos hace unas semanas era muchísimo mayor, pero los 'dientes de sierra' de las estadísticas no gustan en el Gobierno de Sánchez.

Sobre lo que pocos tienen dudas es que dejar a Madrid en una fase 0,5 o en la fase 0 tendrá, desgraciadamente, respuesta en las calles, ya muy movilizadas durante los últimos días en el Barrio de Salamanca de la capital. Las últimas jornadas, el entorno de la calle de Núñez de Balboa se ha visto copado hacia las nueve de la noche por multitud de personas que, portando banderas de España, demandan la apertura de comercios y la dimisión del presidente del Gobierno.

Los argumentos de Madrid

Madrid fundamenta su petición en que "lo avalan los datos asistenciales". Así, desde el Gobierno regional, destacan "el descenso de casos respecto al pico máximo que se produjo alrededor del 31 de abril". También inciden en que el número de hospitalizados ha bajado un 86% y el número de camas de hospitalización necesarias un 91,61%, mientras que en las UCIs ha descendido un 73% y el número de camas necesarias un 79,61%, informa Europa Press.

Respecto a Urgencias, el número de pacientes pendientes de ingreso fue de 2.654, y el 13 de mayo fue de 164. Destacan también que ha habido un descenso de un 93,82%. En Atención Primaria, la Consejería de Sanidad asegura que el número de pacientes en seguimiento domiciliario ha bajado un 90%o, pasando de 24.081 pacientes diarios a 2.244. Además, destaca que el número de pacientes con PCR positiva llegó a alcanzar los 3.300 diarios; y en la última semana se sitúa en los 150 de media.

El Ejecutivo regional también hace hincapié en la disponibilidad de camas, que, a su parecer, cumple los criterios de Sanidad. Así, trasladan que, en hospitalización, el criterio es tener entre 37 y 40 camas de enfermos agudos por 10.000 habitantes, por tanto, necesitarían un máximo de 24.750. "Hemos llegado a tener 25.000, sin contar con la capacidad de ampliación de Ifema y hoteles sanitarizados", recuerdan, al tiempo que desgranan que "ahora hay 2.076 camas ocupadas, que representa solo un 8,3% respecto al pico máximo".

Respecto a las camas de UCI, el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso incide en que se requieren entre 1,5 y 2 camas por cada 10.000 habitantes por lo que requerirían 1.340. "Ya disponemos de 1.350 y hemos llegado a tener 1.942. Ahora tenemos 358 camas de UCI ocupadas. Solo el 18,4% del máximo ocupado", defienden.

Mostrar comentarios