Baréin reduce en un año la pena de cárcel contra prominente activista

  • Un tribunal de Baréin decidió hoy reducir de tres a dos años la pena de cárcel contra el defensor de derechos humanos Nabil Rajab, un día después de que las autoridades detuvieran y condenaran a un mes de prisión a otra destacada activista.

Manama, 11 dic.- Un tribunal de Baréin decidió hoy reducir de tres a dos años la pena de cárcel contra el defensor de derechos humanos Nabil Rajab, un día después de que las autoridades detuvieran y condenaran a un mes de prisión a otra destacada activista.

Según informó a Efe el abogado de Rajab, Mohamed al Jishi, la corte redujo en seis meses la pena en dos de los casos que se le imputan, mientras que confirmó la sentencia de un año en un tercer caso.

Rajab, vicesecretario general de la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH), fue sentenciado el pasado julio a tres años de cárcel por participar en tres protestas "ilegales".

En otro caso, el Tribunal de Apelaciones de Baréin absolvió el pasado agosto a este activista de derechos humanos del cargo de difamación por criticar en la red social Twitter al primer ministro bareiní, el jeque Jalifa bin Salam al Jalifa.

La revisión de la pena contra Rajab llega un día después de que la activista Zainab al Jawaya, fuera condenada a un mes de cárcel por entrar en la rotonda Lulu, en el centro de Manama, el epicentro de las protestas del 2011 y a la que las autoridades prohíben acceder a los opositores.

Al Jawaya, detenida la noche anterior a que se dictara la sentencia, ha sido arrestada en varias ocasiones durante los últimos 22 meses por participar en las manifestaciones.

Esta activista es hija del prominente opositor Abdulhadi al Jawaya, condenado a cadena perpetua por incitar a las protestas y a derrocar al régimen.

Baréin, de mayoría chií pero gobernado por una monarquía suní, es escenario desde febrero de 2011 de continuas protestas populares para pedir reformas políticas que han sido reprimidas por la fuerza por las autoridades.

Durante estos 22 meses de agitación civil han muerto al menos un centenar de personas y más de 2.000 han sido detenidas, en su mayoría chiíes, de acuerdo a los datos de la oposición bareiní.

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