Bangui, 4 abr.- El ministro de Asuntos Exteriores de Benin, Nassirou Bako-Arifari, confirmó hoy a Efe que su país está dispuesto a conceder asilo al derrocado presidente de la República Centroafricana, François Bozizé, si este lo solicita.
"No hemos recibido aún oficialmente una petición del presidente Bozizé. Benin no es un país nuevo para él, lo conoce bien y, si elige exiliarse en nuestro país, pensamos que estaríamos dispuestos a acogerle", dijo a Efe Bako-Arifari.
El jefe de la diplomacia beninesa hizo esa declaración en la capital centroafricana, Bangui, en el marco de una visita de una delegación ministerial para presentar las recomendaciones de la cumbre que la Comunicad Económica de los Estados de África Central (CEEAC) celebró ayer en Yamena sobre el golpe de Estado de la República Centroafricana por el que fue derrocado Bozizé.
En ese sentido, Bako-Arifari señaló que los líderes de la CEEAC han solicitado la disponibilidad de Benin para acoger a Bozizé.
El pasado 24 de marzo, los rebeldes de la coalición Seleka tomaron Bangui y acabaron con diez años de poder de Bozizé, que abandonó precipitadamente la capital con rumbo a Camerún, país vecino desde donde pretende pedir asilo en Benin.
Por otra parte, el ministro centroafricano de Infraestructuras Estatales, Crépin Mboli-Goumba, indicó que hoy que el líder de Seleka y autoproclamado presidente del país, Michel Djotodia, ha aceptado las recomendaciones tomadas el miércoles por la CEEAC.
"El primer ministro (Nicolas Tiangaye) se ha entrevistado esta mañana a su regreso de Yamena con el jefe del Estado y este ha manifestado su acuerdo. De momento, no hay ningún problema, pues el deseo de todo el mundo es que el país reanude la legalidad constitucional", comentó Mboli-Goumba, aliado de Tiangaye.
Durante la cumbre celebrada en Chad por la CEEA, los países asistentes condenaron el golpe de Estado en la República Centroafricana y rechazaron reconocer a Djotodia como presidente.
La cumbre sirvió también para pedir la creación de un consejo de transición elegido por las fuerzas centroafricanas, que debería designar por consenso al presidente que lidere la transición.
Según las recomendaciones de los líderes de la CEEA, la transición no debe superar los 18 meses y debe respetar el espíritu de los acuerdos de paz de Libreville, firmados en enero entre el Gobierno de Bozizé, la oposición democrática y Seleka.
Además, la CEEA solicitó la creación de un órgano legislativo que revise la Constitución centroafricana, suspendida ahora por Djotodia.
La oposición democrática se retiró este martes del Gobierno de unidad formado por Djotodia, que se ha marcado como objetivo convocar elecciones generales en tres años.
La coalición Seleka, compuesta por cuatro grupos rebeldes, se alzó en armas en el norte del país el pasado mes de diciembre al considerar que Bozizé no había respetado unos acuerdos de paz firmados en 2007.
Los rebeldes retomaron las armas el pasado marzo tras acusar al gobierno de incumplir los nuevos acuerdos de paz de Libreville.
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