Cameron sufre un duro golpe con la dimisión del responsable de reducir el déficit

  • Londres.- La dimisión de David Laws como titular del Tesoro es un duro golpe para el Gobierno de coalición británico, en un momento en el que busca recortar el abultado déficit, la prioridad del primer ministro conservador, David Cameron.

Cameron sufre un duro golpe con la dimisión del responsable de reducir el déficit
Cameron sufre un duro golpe con la dimisión del responsable de reducir el déficit

Londres.- La dimisión de David Laws como titular del Tesoro es un duro golpe para el Gobierno de coalición británico, en un momento en el que busca recortar el abultado déficit, la prioridad del primer ministro conservador, David Cameron.

Acosado por la prensa al revelarse que reclamó al Parlamento dietas por el alquiler de habitaciones en casas propiedad de su pareja, Laws se vio forzado anoche a renunciar para evitar que el escándalo perjudicase a la coalición entre "tories" y liberaldemócratas que apenas lleva tres semanas en el poder.

Su partida es un revés porque Laws, considerado un economista brillante por sus compañeros liberaldemócratas, era visto como figura clave del Gobierno para sacar adelante su plan de austeridad a través de recortes del gasto público que ayuden a reducir en 6.250 millones de libras (unos 7.125 millones de euros) el déficit, estimado en 156.000 millones de libras (117.840 millones de euros).

Esta es, además, la primera baja ministerial que sufre el nuevo Gobierno y que de alguna manera, según los comentaristas, pone fin de manera abrupta a la "luna de miel" que disfrutaban Cameron y el viceprimer ministro británico, el liberaldemócrata Nick Clegg.

Cameron y Clegg, reflejados en la prensa como dos apuestos gays casados en una unión civil, habían dado la imagen de una nueva era en la política británica, en la que dos políticos de distintos partidos se ponían de acuerdo sobre la mejor manera de sacar adelante al país en momentos de gran endeudamiento.

Pero como ha ocurrido en el pasado con otros ministros, la prensa británica no perdona y ayer el diario "The Daily Telegraph" publicó el alcance de las dietas que disfrutaba Laws.

Según el rotativo, el diputado reclamó dietas durante ocho años y alcanzaban las 40.000 libras (unos 45.600 euros), un monto que el mismo político dijo que devolverá.

Laws argumentó que reclamó el dinero sin dar explicaciones porque quería mantener en secreto la relación con su pareja, James Lundie, y no deseaba revelar su inclinación sexual.

Según las reglas parlamentarias del 2006, los diputados no pueden alquilar hospedaje de inmuebles que son propiedad de sus parejas.

Ex banquero de la City de Londres, Laws, de 44 años, estudió Economía en la Universidad de Cambridge y era una de las nuevas "estrellas" de su partido, más proclive al mercado libre frente a las políticas tradicionales de izquierda de la formación.

Diputado desde 2001 por la circunscripción de Yeovil (suroeste de Inglaterra), Laws ascendió rápidamente en las filas del partido, especialmente porque asesoraba en materia económica.

Laws, crucial en las negociaciones que llevaron a la formación del Gobierno de coalición, pareció conectar rápidamente con los conservadores, con los que comparte la idea de que deben limitarse los poderes de la Unión Europea (UE) y se debe reducir el papel del Estado en la prestación del bienestar.

El político será sustituido en el Tesoro por el liberaldemócrata Danny Alexander, ministro británico para Escocia e importante negociador en el acuerdo de coalición.

"No veo cómo puedo continuar con mi importante trabajo del presupuesto y la revisión de los gastos mientras tengo que atender con las consecuencias privadas y públicas de las recientes revelaciones", dijo Laws en su carta de dimisión.

Tras la renuncia, Cameron destacó que en poco tiempo Laws "situó al Gobierno en el correcto camino para afrontar el déficit, que supone un riesgo para la economía".

Por su parte, Nick Clegg dijo sentir un "gran respeto" por la forma en que Laws actuó desde que salieran a la luz las revelaciones y afirmó que la intimidad de éste ha quedado arruinada.

Después de que la prensa revelase el escándalo, el político admitió que vivía con su pareja, pero los dos no se consideraban cónyuges, "por ejemplo -dijo- no compartimos cuentas bancarias y ciertamente tenemos vidas sociales separadas".

"No obstante, yo acepto que esto puede interpretarse de otra manera y voy a devolver inmediatamente los costes del alquiler y otros costes de alojamiento que yo reclamé", agregó.

Viviana García

Mostrar comentarios