Campaña de comicios en Costa Rica en su recta final marcada por la indecisión

  • La campaña política para las elecciones del próximo 2 de febrero entró hoy en su recta final marcada, según las encuestas, por altos porcentajes de indecisos y la lucha entre el Partido Liberación Nacional, que busca su tercer mandato consecutivo, y el cambio propuesto por otras fuerzas.

Douglas Marín

San José, 2 ene.- La campaña política para las elecciones del próximo 2 de febrero entró hoy en su recta final marcada, según las encuestas, por altos porcentajes de indecisos y la lucha entre el Partido Liberación Nacional, que busca su tercer mandato consecutivo, y el cambio propuesto por otras fuerzas.

La campaña política reinició este jueves tras poco más de un par de semanas de veda por las fiestas de Navidad y de Año Nuevo impuesta por el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), que durante ese periodo prohibió a los candidatos pagar anuncios en medios de comunicación.

Cuando falta un mes para los comicios, las últimas encuestas ubican al candidato del gobernante Partido Liberación Nacional (PLN), Johnny Araya, luchando por el primero lugar con José María Villalta, del izquierdista Frente Amplio.

Una encuesta del Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP) de la estatal Universidad de Costa Rica, indicó en diciembre que Araya suma un apoyo del 17,4 % y Villalta un 15,7 %.

Mientras una de la firma Unimer, también de diciembre, situó a Villalta con un 22 % de los decididos a votar, seguido por los aspirantes del derechista Movimiento Libertario, Otto Guevara, y el oficialista Araya, con un 19 % cada uno.

En ambas encuestas, aplicadas a finales de noviembre, el porcentaje de indecisos ronda el 30 % y otro 30 % es considerado como posibles abstencionista.

Ningún candidato alcanza el 40 % de votos válidos necesarios para ganar las elecciones en una primera ronda.

El analista político Claudio Alpízar dijo a Efe que a partir de noviembre se evidenció una "sensible baja" en el apoyo a Araya y una subida "paulatina" de Villalta y Guevara, que los han puesto "en una relación de iguales".

"Lo que viene en enero será determinante para tener más cercanía y seguridad de si la tendencia se mantiene o de si se pudiera polarizar la elección entre dos candidatos", explicó Alpízar.

El analista comentó que la posibilidad de una segunda ronda es cada vez más cercana al punto de que el PLN, que antes de noviembre figuraba como amplio favorito, ha empezado a considerarla a lo interno.

La caída del apoyo a Araya, de hasta 20 puntos en tres meses según una encuesta de la firma Unimer publicada en noviembre, se debe a dos factores principalmente, según Alpízar.

El primero es que la campaña del candidato ha querido presentarse como "independiente" de los últimos 8 años de Gobierno del PLN, lo cual "fue un error, al no resaltar los logros y presentar resultados", comentó el analista.

"El costarricenses es el elector más crítico de Latinoamérica y las actitudes de fingir que el candidato oficial no es tan oficial, le ha pasado una factura grave", aseguró.

El otro factor es el ascenso del diputado José María Villalta, una figura joven de 36 años que ha basado su campaña política en proponer un cambio y terminar con los gobiernos de "los mismos de siempre".

"Su crecimiento lo concentro en un disgusto ciudadano por la falta de resultados concretos y una acumulación de casos de corrupción" en los últimos gobiernos, explicó Alpízar.

El analista descartó que el ascenso del Frente Amplio, un partido pequeño que no ha gobernado y que nunca ha tenido más de un diputado en el Congreso, pueda considerarse como un resurgimiento de la izquierda como ideología, y más bien apuntó a que se trata de un fenómeno de protesta contra los partidos tradicionales.

Lo cierto del caso es que la cifra de indecisos se ubica entre un 30 y un 40 % del electorado en casi todas las encuestas que se han publicado, y es probable que sea esta masa de votantes la que termine decidiendo si da continuidad al PLN por tercer periodo consecutivo tras los gobiernos de Óscar Arias (2006-2010) y Laura Chinchilla (2010-2014).

Se prevé que este enero la campaña política caliente, pues tras su inicio, el pasado 2 de octubre, se ha percibido una gran apatía de la gente y pocos signos externos y anuncios promocionales de los candidatos.

Villalta ha tratado de conquistar al electorado proponiendo un gobierno con un Estado más fuerte, fortaleciendo instituciones públicas como la Caja Costarricense del Seguro Social, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes y el Instituto Costarricense de Electricidad.

También ha anunciado una reforma tributaria para que los ricos paguen más y su intención de renegociar los tratados de libre comercio que Costa Rica tiene vigentes.

Araya también ha apostado por el fortalecimiento de algunas instituciones públicas, una reforma fiscal y prometió erradicar la pobreza extrema con la generación de más empleos, la atracción de inversiones y un mayor apoyo al comercio internacional y la producción local.

El próximo 2 de febrero cerca de 3,1 millones de costarricenses están llamados a las urnas para escoger entre 13 candidatos al presidente y los 57 diputados del Congreso para el periodo 2014-2018.

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