Casi toda la oposición, contra una reforma fiscal "injusta" y "electoralista"

Madrid, 18 sep.- La mayoría de los grupos de la oposición se han mostrado hoy en contra de la reforma fiscal, que pasa su primer examen en el Congreso, por considerarla "injusta" para los más necesitados y presentada con un ánimo "electoralista", en víspera de los comicios generales del año que viene.

Hoy se debaten y votan las doce enmiendas a la totalidad a los tres proyectos de ley sobre la reforma fiscal (IVA, Sociedades e IRPF), presentadas por PSOE, Izquierda Plural, UPyD, BNG y ERC.

El portavoz de Economía del PSOE en el Congreso, Pedro Saura, ha criticado que el Gobierno del PP "desproteja" al 90 % de la población.

"Para usted y para el 10 % de los que tienen la riqueza más alta del país es un día feliz", ha afirmado, tras añadir que esta reforma es "electoralista" porque utiliza los impuestos cuando vienen las elecciones para "engañar" y poner en riesgo la cohesión social.

"Su reforma es una mezcla de electoralismo, mentira e irresponsabilidad", ha dicho.

Ha asegurado que el PP trajo una ley de "amnistía fiscal" y ahora hace un "regalo fiscal" a las rentas más altas y grandes corporaciones.

Saura ha afirmado que cuando la desigualdad crece y hay un "cerro de deuda pública" esta reforma es una "irresponsabilidad", por lo que le ha advertido de que no admite que diga que la política fiscal del PSOE es más regresiva que la del PP, lo que ha tachado de "falso y políticamente interesado".

El diputado de Izquierda Plural Alberto Garzón ha basado sus enmiendas en que la reforma es "injusta y un ataque al Estado social" ya que mantiene la brecha entre las rentas del trabajo y del ahorro y sólo contempla "más regalos fiscales a los ricos que a los pobres".

A su juicio no respeta el artículo 31 de la Constitución que dice que todos los contribuyentes deben contribuir al sostenimiento de los gastos públicos según sus ingresos, y ha insistido en que privilegia a grupos económicos que más capacidad tienen para hacer ingeniera fiscal y eludir impuestos.

El diputado de UPYD Álvaro Anchuelo ha acusado al Gobierno de traer su reforma cuando ya han pasado 3/4 partes de la legislatura, en vísperas de las elecciones, lo que es "como si un señor de 75 años viniera aquí a decirnos lo que va a hacer hasta los 100".

Ha recalcado que durante el último Gobierno del PP se ha sometido a los ciudadanos a un "infierno" con subidas de impuestos en plena crisis, y de manera desigual, ya que al mismo tiempo se ha aprobado una "amnistía fiscal" para aquellos que crean riqueza "para sí mismos".

Ya en el grupo mixto, el portavoz de Amaiur Rafael Larreina ha destacado que su formación votará contra el proyecto de ley de IVA, que a su juicio debería tener mayor progresividad, pero no participará en la votación de Sociedades e IRPF, ya que entran dentro del régimen fiscal propio de su comunidad autónoma.

La diputada de ERC Teresa Jordá también ha criticado que la reforma grave más los rendimientos del trabajo que los rendimientos al capital y ha reiterado que "castiga a quien trabaja y beneficia al especulador".

Desde Compromís, el diputado Joan Baldoví ha negado que "en absoluto" esta reforma vaya a llegar a todos y ha asegurado que debería haber medidas que pongan freno a la impunidad de los evasores.

Según la diputada de CC Ana Oramas, el Gobierno pretende socavar la autonomía de Canarias con acciones como no respetar aspectos de su fiscalidad como las franquicias fiscales sobre el consumo, y ha confiado en poder cambiar el sentido de su voto durante la tramitación parlamentaria.

Para la representante de BNG Olaia Fernández, el PP engaña con la reforma a la ciudadanía, ya que es beneficiosa para las rentas altas y las empresas, y perjudicial para las medias y bajas, además de dañina para las CCAA.

En sentido contrario, Carlos Salvador, portavoz de UPN, ha dicho que su formación valora la reforma porque "es necesaria y conveniente" y votará contra la devolución de los textos .

También el diputado de Foro Asturias Enrique Álvarez ha argumentado en contra de las enmiendas a la totalidad, ya que supondría negar cualquier acuerdo, aunque ha reclamado incentivos fiscales al ahorro y a la previsión social a largo plazo.