Catalá critica a carmena y colau por poner en duda la seguridad jurídica, la convivencia e inversiones


El ministro de Justicia, Rafael Catalá, criticó hoy a las nuevas alcaldesas de Madrid y Barcelona, Manuela Carmena y Ada Colau, respectivamente, por estar poniendo en cuestión en sus ciudades la seguridad jurídica, la convivencia o inversiones que conllevan miles de puestos de trabajo.
Catalá se pronunció al respecto esta tarde en Guadarrama (Madrid), durante su intervención en el Campus FAES 2015, que organiza esta fundación ligada al PP y que preside José María Aznar.
El responsable de Justicia intervino en un debate sobre reformas y procesos de ruptura, donde defendió que el Gobierno de Mariano Rajoy tiene la “responsabilidad” de evitar que a España le suceda como a Grecia, país que dijo está cuestionado ahora como “Estado solvente”.
En este sentido, frente a los procesos de reforma que ha liderado el Ejecutivo de Rajoy, Catalá se preguntó “qué idea de la seguridad jurídica y de la convivencia tienen, por ejemplo, las alcaldesas que dicen que las leyes se pueden desobedecer si no les gustan” o que animan a su Policía local a “inhibirse” en procesos de desahucio.
“GOBIERNO EMPÁTICO”
El ministro se refirió así, en el caso de la desobediencia a determinadas leyes, al hecho de que Colau declarase que no aplicaría leyes que le parecieran injustas. Por su parte, Carmena ha manifestado que no ve necesario que la Policía madrileña acuda a la ejecución de desahucios por orden judicial.
Además, Catalá, en referencia a inversiones pendientes de realizar en Madrid, como la ‘operación Chamartín’, censuró que se juegue con “con el futuro de inversiones del que dependen miles de puestos de trabajo”. Asimismo, el ministro criticó a Carmena por no acabar “de desautorizar y expulsar” al concejal Guillermo Zapata por sus tuits con burlas sobre el holocausto, Irene Villa o Marta del Castillo.
En este sentido, el titular de Justicia dijo que el PP tiene la “responsabilidad” de frenar la “efervescencia” que plantean partidos como Podemos, algo que considera debe hacerse “mediante una opción de un Gobierno riguroso, empático, acorde con las necesidades reales de los ciudadanos”.
“ARREMETIDA” DE LA RUPTURA
Argumentó que la formación popular debe defender una serie de valores “frente a la arremetida de los procesos de ruptura tanto de la izquierda como de los nacionalismos excluyentes”. Explicó que estos valores son “la seguridad, la estabilidad, los derechos individuales, las libertades públicas y privadas y la igualdad de oportunidad”.
Destacó que estos principios son “los mismos que gobernaron el proceso de cambio en 1978” y considera que son los que comparte una “gran mayoría de españoles”.
El ministro concluyó que estas necesidades que tiene una mayoría de ciudadanos “no se alcanzan nunca por el callejón sin salida que significan los procesos de ruptura, sino más bien por la ancha avenida que son los procesos de la reforma”.

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