Pedro Sánchez ha pedido directamente a Quim Torra y a su Gobierno que condene la violencia. Y que lo haga de forma inmediata porque es el presidente de todos los catalanes. Es la primera petición directa del jefe del Ejecutivo en funciones ante lo que ha llamado "imágenes dramáticas" que se están produciendo en las últimas horas en Cataluña. También desvela que ha montado un gabinete de crisis en Moncloa para seguir todos los acontecimientos tras la sentencia del 'procés'.
Sánchez ha afirmado, en una comparecencia en Moncloa tras reunirse con Pablo Casado, Albert Rivera y Pablo Iglesias, que "el deber político y moral de Torra es condenar sin excusas ni paleativos, con la máxima determinación, el uso de la violencia en Cataluña". El presidente en funciones ha añadido, no obstante, que sigue tendiendo la mano al Govern para dialogar en un futuro, pero antes le ha solicitado que se posicione en contra de los violentos.
El jefe del Ejecutivo también se ha referido a que contempla todos los escenarios ante lo que pueda pasar en los próximos días en Cataluña y a las decisiones que pueda tomar el Govern y el Parlament. Es un aviso a navegantes antes de partir hacia el Consejo Europeo extraordinario de mañana y pasado. Sin embargo, tanto fuentes del PP como de Podemos indican que tras verse con Sánchez la conclusión que sacan es que Sánchez no tiene, de momento, intención de aplicar la Ley de Seguridad Ciudadana o el artículo 155.
Sánchez también ha desvelado lo adelantado en estas páginas: desde el jueves tiene montado en Moncloa un gabinete de crisis, que ha llamado "comité de coordinación", para realizar un seguimiento de todo lo que ocurre en Cataluña. Están representados los ministerios de Interior, Exteriores, Defensa, Justicia, Economía, Hacienda y Fomento. También el Departamento de Seguridad Nacional y el Centro Nacional de Inteligencia, así como su gabinete y la Secretaría de Estado de Comunicación. Ha asegurado que están en "alerta permanente".
Respecto a 'Tsunami Democràtic', el movimiento que está moviendo los hilos de las protestas en las calles catalanas, Sánchez ha asegurado que ya cuenta con información sobre quién podría estar detrás de este grupo que también está poniendo en jaque al Estado con concentraciones improvisadas y que estuvieron a punto de colapsar El Prat. También amenazan con boicotear El Clásico del día 26.
El presidente en funciones ha agradecido a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (Policía Nacional, Guardia Civil y Mossos d'Esquadra) su "profesionalidad" a pesar de la "gran presión" que están recibiendo. También les ha enviado palabras de "reconocimiento y gratitud" por su trabajo "en defensa de la legalidad".
Respecto a los violentos, que esta noches están volviendo a sembrar el caos en Barcelona, Sánchez ha afirmado que "el Gobierno no va a consentir bajo ningún concepto que la violencia se imponga a la convivencia". Ha asegurado que tiene "todos los mecanismos del Estado" a su disposición y que actuarán contra quienes promueven acciones violentas "contra las personas, los bienes públicos o los bienes particulares".
El líder del Ejecutivo ha vuelto a repetir que responderá al desafío en Cataluña empleando tres reglas: la "firmeza democrática, la unidad y la proporcionalidad en la respuesta". Ha añadido que modulará su reacción en función de la actitud de los líderes independentistas.
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